21 años de la vergonzosa fuga del exdictador Alberto Fujimori

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Hace 21 años, el 13 de noviembre del año 2000, el exdictador Alberto Fujimori se fugó de nuestro país en un avión de itinerario, como si de pronto se hubiera convertido en un ciudadano común y corriente, con destino a Brunei, en los Emiratos Árabes, para, supuestamente, participar en la cita anual de la APEC (Asociación del Pacífico para la Economía y el Comercio).

Luego de hacerse públicos el robo sistemático de las arcas del Estado, la red de corrupción que había secuestrado nuestro país, las diversas ejecuciones a cargo del comando paramilitar Grupo Colina, violaciones a los DDHH, la compra de líneas editoriales de diversos medios de comunicación, la gran vida y estudios pagados en el extranjero de los hijos del sátrapa con dinero del Tesoro Público, tarde o temprano debía caer el jefe del gobierno más corrupto de la historia republicana de nuestro país y el séptimo gobierno más corrupto de la historia de la humanidad.

MAPA: LA RUTA DE LA VERGÜENZA

MapaFuga

El hoy presidiario Fujimori obligó ese día a todo su equipo de seguridad y a los automóviles oficiales a salir muy temprano de Palacio con dirección a la Carretera Central, engañando a la prensa que imaginó que el presidente iba con ellos.

Por esos días Fujimori había venido realizando un acto teatral que la población celebraba a carcajadas cada vez que lo veía en la televisión y que consistía en realizar una supuesta búsqueda y persecución de su ex asesor y socio, Vladimiro Montesinos, quien se encontraba prófugo (en realidad ya había fugado del país en un yate algunas semanas antes), y los medios, todos ellos fujimoristas, se prestaban a la farsa.

Fuga

El 13 de noviembre, mientras iban en dirección a Chaclacayo, el sátrapa una vez más hizo gala de su astucia, envió a los Húsares de Junín a cargar sus maletas y se dirigió raudo al aeropuerto para su delincuencial fuga. En el avión que iba con ruta a Los Ángeles en EEUU, se subieron decenas de maletas y bultos a nombre de Fujimori. Pero en el intercambio para Asia el equipaje tomó el camino hacia Tokio, mientras el sátrapa se dirigía a la cita de la APEP.

No se sabría más del exdictador, no regresó al país, se dirigió a Japón, se refugió en su nacionalidad japonesa junto a sus hermanas y cuñado con las maletas llenas y renunció vía fax. Solo nos dejó a su hijita, hoy investigada por liderar una organización criminal y recibir dinero ilegal para financiar su campaña política. Nunca fue más cierta esa vieja frase: “Lo que se hereda no se roba”…

VERGONZOSA DECLARACIÓN DE FUJIMORI

Fotos: Medios/Agencias