Athletic gana Supercopa de España al empatar 1-1 con Barcelona

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Después de haber conquistado la Copa del Rey, la Liga, la Champions y la Supercopa de Europa en los últimos meses, la Supercopa de España se resistió, y voló hacia Bilbao, donde será recibida con los brazos abiertos tras 31 años de ‘sequía’. Los ‘leones’ se proclamaron campeones en el Camp Nou con todo merecimiento al igualar 1-1 con Barcelona.

El conjunto azulgrana no podrá repetir el pleno de títulos logrado por el Barcelona de Pep Guardiola en el año 2009.

El 4-0 de la ida dejaba la eliminatoria prácticamente imposible para el Barcelona. Nunca en la historia pudo el equipo azulgrana remontar un resultado así. Por más que en los días previos jugadores y técnicos alentaran a la ‘gente blaugrana’ con mensajes esperanzadores, ganar esta Supercopa se presumía como poco menos que un milagro.

Y éste no llegó, por más voluntad y ganas que le pusieran Piqué, Iniesta, Luis Suárez y el resto de sus compañeros.

UN BARCELONA CANSADO

El reto era difícil, y más ante un rival con la solidez y calidad que mostró el Athletic a lo largo de los 180 minutos. Los de Ernesto Valverde volvieron a ser un muro casi impenetrable en el Camp Nou.

Y el Barça fue incapaz de derribarlo: los tres partidos -con viajes a Georgia, donde se ganó la Supercopa de Europa al Sevilla en la prórroga, y a Bilbao incluidos- en apenas siete días se pagaron muy caros. Y más a estas alturas, con tan poco rodaje a cuestas. Físicamente, el equipo aún está muy verde.

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El Barça buscó el gol desde el primer momento. Pero Gorka Iraizoz apenas tuvo que intervenir. Pedro, en el 6′, y Piqué, con un remate a bocajarro al larguero en el 7′, le dieron los primeros avisos.

Los de Luis Enrique, sin chispa y con pocas ideas, intentaron poner cerco a su rival a base de pases largos y de colgar balones al área. Pero su estrategia no funcionó ante un rival tan ordenado.

Messi, rezagado en la media, muy atrás y acomodado a la derecha, se sintió como pez fuera del agua tan alejado del área. Intervino muy poco. E Iniesta trataba de poner orden, pero el juego del Barça era lento y previsible.

MESSI DA ESPERANZAS

El gol de Lionel Messi al filo del descanso dio esperanzas a los culés. El argentino marcó el 1-0 rematando a bocajarro una asistencia de Luis Suárez con el pecho tras un gran buen centro de Rakitic desde la derecha (43′).

Instantes después, el árbitro, Velasco Carballo, inició su carrusel de desatinos amonestando a Pedro por protestar una pérdida de tiempo del meta Gorka Iraizoz, que había impedido a los azulgranas recoger el balón del fondo de la portería. El colegiado madrileño puso la guinda añadiendo sólo un minuto de tiempo añadido antes del descanso.

En la reanudación, el panorama empeoró. El Barça quería, pero no podía. Y en su búsqueda desesperada de goles, descuidó su retaguardia. Bravo evitó el empate desbaratando dos peligrosísimos remates de Susaeta (54′) y De Marcos, que dejó en evidencia a Mathieu en el carril izquierdo (55′).

ROJA A PIQUÉ

Pero la acción que marcó el desenlace final fue la expulsión de Piqué, que vio la roja directa en el 56′ por protestar al juez de línea otro peligroso ataque rojiblanco. Velasco Carballo, puntilloso, no lo dudó ni un instante y lo echó a la calle. Y el Barça se quedó con diez durante la última media hora.

Para entonces, la remontada era ya una utopía, aunque el Barça siguió insistiendo. Gorka Iraizoz evitó el segundo en mano a mano con Pedro (57′). Instantes después, Rakitic estrelló un remate en el lateral de la red (58′).

 ADURIZ, OTRA VEZ

Luis Enrique quemó sus naves dando entrada a otros dos delanteros: los canteranos Sandro y Munir, en lugar de Rakitic y Pedro. La apuesta a todo o nada tampoco dio resultado.

Athletic en superioridad numérica, aprovechó el desbarajuste defensivo local para empatar. Aduriz se quedó completamente solo ante Claudio Bravo tras un mal rechace defensivo y, a la segunda -el chileno despejó en primera instancia su disparo- no perdonó (1-1, 75′). El ariete vasco, ‘héroe’ tras su ‘hat-trick‘ de la ida, volvió a ver puerta en el Camp Nou.

Por Ricard López de Sport