RÍO DE JANEIRO.– El órgano responsable por el control de la seguridad biológica en Brasil aprobó hoy la tercera y última fase de pruebas de una vacuna contra el dengue desarrollada por científicos brasileños y que se ha mostrado eficaz en los experimentos ya realizados con animales y humanos.
El inicio de la fase decisiva de pruebas, en que la vacuna desarrollada por el Instituto Butantan será probada en 17.000 voluntarios de entre 18 y 59 años, fue aprobado por la Comisión Técnica Nacional de Bioseguridad (CTNBio), el organismo interministerial responsable por la aprobación de estudios con productos y medicinas que usan organismos genéticamente modificados.
Tras haber analizado la seguridad de la vacuna en experimentos con un pequeño grupo de voluntarios, la nueva fase, a ser iniciada en septiembre próximo y que puede prolongarse por un año, servirá para probar su eficacia.
El Instituto Butantan, dependiente del Gobierno del estado de Sao Paulo y responsable por el medicamento, informó de que usará 17.000 voluntarios en el nuevo experimento con humanos a gran escala, de los que unos 11.330 serán inmunizados con la vacuna y el restante recibirá un placebo.
La medicina usa diferentes tipos del virus del dengue, modificados genéticamente.
La vacuna se caracteriza por ser de dosis única y tetravalente, es decir por prevenir a la población contra los cuatro tipos de dengue (1, 2, 3 y 4) y, de resultar exitosa en la nueva fase de pruebas, podrá estar disponible comercialmente el próximo año.
El inicio de la fase decisiva de pruebas, sin embargo, aún depende de la autorización de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria, organismo regulador dependiente del Ministerio de Salud.
Según el Instituto Butantan, además de ofrecer la primera vacuna licenciada y de eficacia comprobada contra el dengue, el proyecto permitirá que la medicina, en un 100% brasileña, sea producida en el país y atienda gratuitamente a toda la población.
Además del Instituto Butantan, el también brasileño Instituto de Tecnología de Inmunobiológicos Bio-Manguinhos, un laboratorio vinculado al Ministerio de Salud, estudia desde el 2009 una nueva vacuna contra el dengue que desarrolló en asociación con el laboratorio privado GSK.
Como aún no existe vacuna contra el dengue, la única herramienta disponible hasta ahora para prevenir la enfermedad es la eliminación de los focos en que se cría el mosquito “aedes aegypti”, que transmite el virus responsable por la enfermedad.