SAO PAULO.- El Foro de Davos se abre este miércoles en Brasil bajo la sombra de la guerra comercial, por la decisión del presidente de EEUU, Donald Trump de establecer aranceles a las importaciones de acero y aluminio, una consecuencia de la política de “América primero”.
El asunto ocupará inevitablemente buena parte del foco de atención en São Paulo, entre otras razones, porque el país anfitrión es uno de los más afectados por la medida.
EE UU es el destino de un tercio de las exportaciones brasileñas de acero, un sector del que dependen en el país 200.000 empleos directos.
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La plenaria de apertura del miércoles contará con la presencia del presidente de Brasil, Michel Temer, y el legendario futbolista Edson Arantes do Nascimento, Pelé, que recibirá la condecoración ‘Ciudadano Global 2018’.
Pelé también será el protagonista del panel ‘Un conocimiento, una idea’ el miércoles 14 de marzo, en donde contará “cómo contagió al mundo con la pasión por el fútbol y por Brasil”.
El Gobierno de Brasil ya ha expresado su preocupación por las consecuencias de la medida y, aunque intenta buscar una solución diplomática, no descarta abrir una batalla legal en organismos internacionales.
Uno de los participantes en el Foro de São Paulo será precisamente el director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), el brasileño Roberto Azevedo.
La decisión de Trump ha acelerado el interés de algunos países por buscar acuerdos comerciales alternativos.
La pasada semana, se abrieron oficialmente las conversaciones del Mercosur con Canadá, al tiempo que ese organismo intenta dar un impulso que permita alcanzar el eternamente aplazado pacto comercial con la UE.
Pero Brasil es también el mejor ejemplo de que el continente americano se mueve este año entre dos aguas. Las buenas perspectivas económicas chocan con una incertidumbre política sin precedentes.
Pese a la mejoría de los datos, el Gobierno de Temer acumula una enorme impopularidad y los candidatos presentados por los partidos que lo apoyan –todos en el espectro del centro-derecha- aparecen, por el momento, con muy escaso apoyo en las encuestas para las elecciones presidenciales de octubre.
En todas las predicciones sigue apareciendo como gran favorito el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, aunque todo indica que su condena judicial por corrupción le impedirá llegar a la cita de octubre y hasta puede mandarle a la cárcel en las próximas semanas. (ECHA- Agencias)