Aladino tiene malgeniado a Gareca

 

Christian Cueva es buen futbolista lo malo es que no hay coherencia para que distinga sus deberes en la cancha con el comportamiento fuera de ella. No es completo, falla con conducta rebelde para regocijarse en el lodo de su reiteradas indisciplinas.

Cueva tiene una sonaja en la cabeza para no darse cuenta que el fútbol profesional dura poco, se va en un abrir y cerrar de ojos. Cuando quiera enderezar su vida, será tarde.

Ha dado muchas alegrías a la selección. Fue pieza en el engranaje de Ricardo Gareca para que la selección peruana logre clasificar al Mundial de Rusia 2018.

No es necesario ponerle a Cueva un ejército de guachimanes para que saque 20 en conducta cuando debe saber que él mismo es su mejor crítico y su decisión de saber conducirse pesará con el paso del tiempo.

Cueva puede desbarrancarse si quiere pero nos lleva al despeñadero en la clasificación mundialista para Qatar 2022  Es un futbolista que encaja en el esquema futbolístico de Ricardo Gareca y  siempre ha repetido buenas actuaciones.

Sin embargo ‘Aladino’ se permite ser un abusador al entrar en un agujero negro y será difícil sacarlo de ese lugar para que aparezca entero cuando en marzo enfrentemos a Bolivia y Venezuela.

Hoy el presente de Cueva es un auto con desperfectos, un Ferrari con la llanta baja y esquiva su buena relación con lo que le ofrece su convivencia, nada buena al estar separado del Malatyspor de Turquía y un fallo FIFA en su contra que lo obliga a un pago millonario al Santos de Brasil.

Con la turbulencia que lo agobia y la premura de acondicionar su manejo de vida, encuentra una paz pasajera entrenando en solitario en Trujillo, su tierra natal.

Ricardo Gareca está enterado de todo. El  entorno del Tigre asegura que Cueva ya hartó al entrenador argentino y estará a la búsqueda de un reemplazo para el mediocampista.

No será una tarea sencilla para el Tigre que termina con la cabeza por estallar debido al flojo inicio en la carrera para Qatar 2022 y la incertidumbre que podrá contar con la totalidad del plantel para los partidos de marzo.

Si Paolo Guerrero y Jefferson Farfán logran estar al 100% para dentro de tres meses, provocará que Gareca esboce una sonrisa pero con Cueva no existe la felicidad plena.

 

Leave a Reply