Mucha ventaja sería jugar las Eliminatorias para Qatar 2022 con jugadores del medio ante el recorte de no contar con Christian Cueva, Edison Flores. Paolo Guerrero, Luis Advíncula o Yoshimar Yotún en una despoblada partitura sin la música de los más entonados.
Ricardo Gareca deslizó esta posibilidad de utilizar a jugadores del medio ante el probable escenario de la inmovilidad por el cierre de las fronteras y no sea el tránsito aéreo viable para que vuelvan los “extranjeros”.
Otro argumento del ‘Tigre´ se fundamenta a que los jugadores si logran venir serían puestos en cuarentana lo que dará paso a otro inconveniente de no contar con los jugadores a tiempo completo.
La situación de la bicolor podría cambiar si en setiembre, mes anunciado por Conmebol para el inicio de las clasificatorias, las restricciones que hoy son severas no lo sean cuando se inicie el trabajo premundialista de Ricardo Gareca.
Si en un imaginario de artificio el equipo peruano afronte los partidos con jugadores caseros, tendrá que echarse mano a Carlos Cáceda, Alberto Rodríguez, Christian Ramos, Josepmir Ballón, Christopher González, Alejandro Hohberg y Beto da Silva, Aldair Rodríguez, Joel Sánchez Alegría y Kluivert Aguilar, entre otros.
Esta presentación alterna de ningún modo garantiza dar golpes certeros si el incompleto plantel de jugadores no cuente con Pedro Gallese, Luis Advíncula, Christian Cueva, André Carrillo, Edison Flores, Yoshimar Yotún, Raúl Ruidíaz y Paolo Guerrero no formen parte del equipo, todos ellos titulares en la carrera que nos llevó al Mundial de Rusia 2018.
Si Conmebol reacomoda el fixture elaborado antes de la pandemia, el debut sería en condición de visitante ante Chile, nuestro clásico rival que estaría en igual de condiciones que la bicolor. No sin pensar que los sureños tienen atravesada una espina por el 3-0 en la Copa América de Brasil 2019.
Así, resultará un riesgo no detenerse ante la luz roja y seguir un curso tan inusual que hará esta Eliminatoria un tránsito con muchos tropiezos, una carga diferente en medio de la crisis sanitaria.
Ricardo Gareca no encenderá el motor con un equipo alterno que en nada podrá garantizar una nueva presencia mundialista en tanto la pandemia no retroceda.
Es cierto que el campeonato local se aproxima a reanudarse pero con dudas de recibir la autorización del gobierno. Se pisa arena movediza, pero es el riesgo que deberá asumirse.
El indicativo mundial muestra buena cara al programarse las diferentes ligas europeas y de países asiáticos. La Bundesliga que ya jugó tres fechas no ha provocado alarmas de contagio.
Estamos en un panorama de jugar la clasificatoria premundialista en un terreno fangoso, pero es lo que se presenta y sea cual sea la música que pongan, habremos de bailar. Un baile sin la tonada alegre del contigo Perú en las tribunas por ausencia de público en las gradas pero que los jugadores sepan que el acompañamiento será igual.