Lolo, Perico, goleadores de casta

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Perico León escribió en Alianza Lima una sublime historia de fábula que se inició siendo un párvulo, creció y se hizo goleador a diferencia de Lolo Fernández que solamente tuvo la camiseta de Universitario impregnada en la piel.

Perico fue de otra época e igual trascendió en el fútbol peruano, sea con la blanquiazul o la bicolor a punto de ser parte del elenco dirigido por Didí que clasificó y jugó el Mundial de México 70.

Lolo no jugó un Mundial, pero estuvo en las Olimpiadas de Berlín de 1936 como parte de ese once integrado por el ‘Mago’ Juan Valdivieso y los hermanos Prisco y Jorge Alcalde. En la capital alemana aquel equipo peruano dio cátedra de fútbol que enfureció al propio Hitler.

Además, fue campeón de la Copa América de 1939 donde anotó 7 goles repartidos 2 a Ecuador (5-2), 3 a Chile (3-1) y dos a Paraguay (3-0). En la final ante Uruguay (2-1), no se hizo presente en el score.

El mejor ‘9’ del fútbol peruano encuentra a dos postulantes con igual repertorio de colocar los goles que dieron al Perú honores de grandeza en un territorio que ambos conocieron y aplicaron con chanza en los arqueros que se cruzaron en sus caminos,

Perico León tuvo algunas diferencias como que supo moverse con picardía, desplazarse con elegancia y ser letal en el área, Un goleador de enormes facultades.

En cambio, el cañetano tuvo en la potencia de sus disparos su mejor arma para liquidar a sus oponentes. Un verdugo implacable que no nunca perdonó por tener en su ADN la efectividad para encajar los goles de un variado repertorio.

Perico fue artífice de la clasificación peruana al mundial azteca con ese gol a Agustín Cejas en el estadio Nacional, con pase de Héctor Chumpitaz en una tarde en que el coloquio con Dios fue escuchado.

El cañonero tuvo una permanencia de 23 años con la camiseta crema y nunca pensó en buscar otro destino pese a la oferta de Colo Colo que le ofreció un cheque en blanco para que estampara su firma.

Ese amor por una camiseta tiene el reconocimiento de la parroquia crema que lo ha convertido en la sagrada imagen para que todo aquel que llegue a Ate tenga un modelo a seguir.

Perico León partió a la eternidad hace unas semanas y su doloroso viaje sin retorno dejó la tristeza de todo aliancista que siguió sus pasos en una travesía que todos recuerdan.

Lolo es evocado por su reciente cumpleaños y fue el momento para que los seguidores de Universitario pidan que la presencia espiritual del cañonero ilumine por siempre el camino de un grande del fútbol peruano.

 

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