Como se sabe, la justicia peruana declaró procedente el pedido de extradición a Estados Unidos del ex presidente de la Federación Peruana de Fútbol, Manuel Burga Seoane, quien podría ser traslado en los siguientes días al distrito Este de Nueva York, donde se le juzgará solo por el cargo de asociación delictiva en grado de conspiración en agravio de los EEUU, delito que en nuestro Código Penal está tipificado como asociación ilícita para delinquir.
Esto quiere decir que la justicia norteamericana, de acuerdo a sus procedimientos, puede darle libertad condicional, previo pago de una caución, que, en este caso, podría ser menor de 50 mil dólares. Y entonces no sería raro que Manuel Burga se aparezca en algún encuentro de la Copa América Centenario, que se inició ayer en USA y que se prolongará hasta el 23 de este mes de junio.
Como se sabe, Manuel Burga ha esta bajo arresto, en cárcel limeña, desde el 5 de diciembre del año pasado en que fue detenido y encarcelado, fuertemente esposado. Inicialmente se le acusaba de otros cuatro delitos más, que agravaban su porvenir: como ciudadano: asociación delictiva de fraude electrónico en grado de conspiración, y asociación delictiva de lavado de dinero en grado de conspiración.
Se debe recordar que Burga fue involucrado en el escándalo de la FIFA, por presuntamente haber recibido sobornos para favorecer a dos empresas en la entrega de derechos de trasmisión de la Copa América y la Copa Libertadores, cuyas supuestas transacciones ilícitas se ejecutaron a través de bancos estadounidenses.
Pero ayer en la tarde la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema de Justicia del Perú, presidida por el magistrado Javier Villa Stein, declaró procedente el pedido de extradición a Estados Unidos de Manuel Burga solo por un posible delito, asociación delictiva en grado de conspiración, dejando sin efecto las otras acusaciones.
¿Se la lleva fácil nuestro criticado y vilipendiado dirigente? Todo parece indicar que si e imaginamos que, como abogado que es, se debe haber asesorado muy bien tanto con leguleyos peruanos como norteamericanos.
Además, atrás quedaron las acusaciones de haber recibido supuestas coimas de 10 mil dólares mensuales de la Conmebol e igual suma de FIFA, donde era miembro de la Comisión Política.
Pero lo cierto es que la salida de Manuel Burga de la Federación de Fútbol, tan reclamada con todos los sectores vinculados el más popular de los deportes, resultó vana, pues nuestro futbol no ha mejorado y se encuentra igual o peor que con el prontamente extraditado. Una pena y una vergüenza que se nota todos los días, tanto en el pésimamente organizado campeonato descentralizado, como en las categorías menores y con la selección mayor, que no apunta a clasificar al mundial Rusia 2018… Hasta la próxima.