La selección peruana fue eliminada del Mundial de Rusia 2018 al sumar su segunda derrota, ante Francia, por 1-0 con gol de Kilyan Mbappé. Fue el 21 de junio en el Ekaterimburgo Arena donde caímos ante el campeón del mundo, pero otra sería la historia de aquel resultado.
Perú no jugó mal, tuvo la posesión del balón, pero el gol que hubiera lavado la herida de una segunda derrota, no llegó, Francia se quedó con el triunfo en un partido que el infortunio se vistió de corto y la bicolor se quedó con las manos vacías.
Pedro Aquino, el integrante de la selección peruana que más parece el as bajo la manga de Ricardo Gareca, se quedó en borrador y con borrones al no encajar el tanto del empate en la portería de Hugo Lloris.
Aquino viviría de ese gol si al fin y al cabo en versión ampliada de Paolo Guerrero, escribía en la historia mundialista un gol a Francia. Desde que Juan Carlos Oblitas en 1982 en el Parque de los Príncipes anotara en la valla francesa, no hubo ocasión de toparnos con los galos.
Ese empate negado y el triunfo posterior ante Australia por 2-0 permitirían a la selección peruana acceder a la siguiente ronda para seguir en el Mundial y llegar hasta donde las injusticias no cuentan.
El gol fallado por Pedro Aquino dolió tanto como el penal errado de Christian Cueva a Dinamarca. Son dos situaciones que en un Mundial se tiene que capitalizar y de ninguna manera provocar a la fatalidad.
Es así que en el repaso de lo sucedido ante Francia permite tener claro que el resultado pendiente se debe pagar más adelante. Es decir en un próximo mundial para que la clasificación a Rusia 2018 no suene a casualidad.
La resurrección del fútbol peruano cuenta con el aval de una buena eliminatoria pasada, repotenciada para la de Qatar 2022 donde la pelea será mucho más disputada.
No se le perdona a Perú haber desplazado a los ‘caseritos’ de siempre, Chile, Ecuador y Paraguay, que ya están pensando en cómo descuartizar al combinado bicolor y apartarlo de todo, incluso del repechaje.
Ahora bien, poco ha cambiado el equipo. Sigue siendo Perú casi el mismo. No hay retoques y por ahí alguna pieza para la suplencia en el once intocable de Gareca.
Lo inquietante es la eliminatoria con las dificultades planteadas por el coronavirus. Con pinzas en el abordaje de los protocolos sanitarios y confinamiento obligado para evitar algún contagio.
Sin público en las tribunas y ausente la ‘12’ en una eliminatoria atípica, con muchas situaciones de cambios, distanciamientos y pulcritud extremas para que la pandemia no sea la que redunde en los resultados.
De todo esto, habría que hacer que Pedro Jesús Aquino se ponga en forma para que se cobre su revancha, la historia está en deuda con el jugador del León de México. La selección peruana necesita de su hijo menos promocionado porque igual nadie habla de los dos goles que le hizo a Chile en un amistoso en Estados Unidos.