El fútbol de Holanda nunca se sonrojó con haber rastreado sus opciones de ganar un Mundial y no haberlo logrado las tres veces que fue subcampeón de la Copa del Mundo.
No fue el primero de los fracasados como muchos dicen sino el poblado acercamiento de tocar el cielo impedido por otros que tocaron primero el timbre de la gloria. Casi, por puesta de mano.
La Holanda de Johan Cruyff de 1974 en aquel mundial organizado por Alemania, apareció la naranja máquina con su fútbol total, hizo del país tulipán su aparición en el acertijo de un fútbol con ADN distinto a lo que ofrecía el fútbol en aquel momento.
El equipo holandés, recordemos, fue finalista también en Argentina 78 y Sudáfrica 2010 con la misma fórmula que se acercaba a la perfección con un esquema táctico vertiginoso y aceleramiento endemoniado tan solo para hacerle la contra a Brasil y su juego bonito.
Pelé apretó con mano dura su primer título mundial en Suecia 1958 a la edad de 17 años. Fue el inicio de la bella época del Scratch para alargar una vigencia duradera que enlazó un pentacampeonato que nadie ha logrado encasillar.
Hay tricampeones y otros ofuscados candidatos a debilitar al fútbol brasileño pero todo queda en que Brasil seguirá sentado en su trono con repartijas inesperadas como que en el Mundial que organizaron se pensó que debía ganarlo.
Sin embargo con el refrán preciso de en casa del herrero cuchillo de palo, Brasil debió ser el final feliz del cuento de hadas pero Alemania con el 7-1 se encargó de desmenuzar que aún los grandes tienen piernas de trapo.
Han pasado los años y cabe preguntarse de si Holanda finalmente realice un encriptado para hacer algo más que tres subcampeonato o presumir que en ese tendedero de ilusiones mire la salida sin más que hacer.
Holanda no ha modificado la historia, en su momento, encantó pero hoy, ausente en el Mundial de Rusia 2028, no aparece en el top de los mejores equipos de Europa.
Quiere decir que este intento de evocar a la Holanda con su fútbol total, ya no se pueda pensar que remueva sus palpitaciones casi inertes para pasar a un plano inferior
Francia es el vigente campeón con su título logrado en el Mundial de Rusia 2018 sin que presuma de una superioridad al resto. También es cierto que los llamados a hacerle pelea, se quedaron en escarceos y nada más.
El fútbol de estos años son retos que se ponen los más pequeños, los de la segunda línea se esmeran en un crecimiento atrevido y las potencias miran al resto desde lo más alto.
¿Y Perú? Todavía está en el escalón inferior en espera de alcanzar más réditos en su cuenta con poco efectivo pero con crédito que ha logrado tras su participación en el Mundial de Rusia 2018.