WASHINGTON.- La magistrada suprema Ruth Bader, se arrepintió de haber llamado “farsante” al controvertido magnate, Donald Trump y dijo que sus comentarios fueron desatinados, luego de que el precandidato republicano a la presidencia exigiera su renuncia.
La magistrada de 83 años admitió que los jueces no pueden expresar sus opiniones sobre los candidatos a un cargo público y por lo tanto deberían evitar expresar sus opiniones sobre los candidatos.
“En retrospectiva, mis comentarios a las preguntas de la prensa fueron desatinados y me arrepiento de haberlos hecho”, dijo Ginsburg en un comunicado. “Los jueces deberíamos evitar comentarios sobre los candidatos a un puesto público. En el futuro seré más reservada”.
El pasado fin de semana Ruth Bader declaró en el New York Times que Donald Trump era un farsante y posteriormente reiteró sus comentarios en la cadena CNN.
“No tiene consistencia. Dice lo primero que le viene a la cabeza en cada momento. Tiene mucho ego. ¿Cómo ha salido adelante sin hacer públicas sus declaraciones de la renta? La prensa parece haber sido muy suave en eso”, señaló Donald Trump a la televisora.
Los comentarios enfurecieron a Trump, quien respondió exigiendo la renuncia de Ginsburg el miércoles y calificando las aseveraciones de la magistrada de “estúpidas”. También dijo que la jueza “no le funciona bien” la cabeza. (ECHA – Agencias)