La Policía Nacional del Perú mantiene el mando en las labores de control del orden interno en la provincia de Islay, precisó hoy el ministro del Interior, José Pérez Guadalupe, quien explicó que las Fuerzas Armadas solo cumplen labores de apoyo en el cumplimiento de esta responsabilidad.
De ese modo, Pérez Guadalupe descartó que el ingreso de las Fuerzas Armadas a Islay, aprobado por el gobierno, implique el ejercicio de una fuerte represión del gobierno en contra de los sectores que están protestando contra el proyecto Tía María.
“El mando lo sigue teniendo la Policía Nacional para mantener el orden interno”, manifestó en declaraciones al programa Agenda Política.
Según dijo, la intervención de las Fuerzas Armadas en un conflicto social, sin la declaratoria del estado de emergencia, no es algo nuevo en el Perú, pues ya se realizó antes en el marco de la ley y la Constitución.
No obstante, subrayó que solo en caso de ser necesario, el gobierno declarará esa medida de excepción.
“La Policía no ha entrado para imponer un proyecto minero (…) ha entrado para labores de mantenimiento y control del orden interno”, subrayó.
Reiteró la posición del gobierno a favor de impulsar el diálogo para garantizar la paz social en Islay y en todo el país.
Sin embargo, criticó duramente a aquellos dirigentes sociales que bloquean el diálogo con su posición radical en contra del proyecto minero.
En referencia al dirigente Pepe Julio Gutiérrez, quien fue grabado aparentemente cuando solicitaba dinero a la minera Southern para desactivar la protesta a cambio de dinero, dijo que personas de ese tipo han quedado totalmente deslegitimadas para asumir la posición de voceros de la población.
El ministro también consideró que la población tiene todo el derecho para expresar sus dudas sobre si el proyecto Tía María contaminará el ecosistema de la zona y perjudicará la agricultura.
Según indicó, el diálogo debe estar centrado en despejar esas dudas con información creíble y verificable.
Finalmente, destacó que la ministra de Energía y Minas ha dicho que ha cortado comunicación con la minera Southern hasta que no se aclare el presunto caso del intento de entrega de dinero a Pepe Julio Gutiérrez.
“(…) ha mandado a llamar al director general, al dueño de la mina, no estamos defendiendo a una minera, defendemos un proyecto”, concluyó.