SIDNEY/Australia.– Scott Morrison juramentó hoy como primer ministro de Australia tras hacerse con las riendas del Partido Liberal, en el poder desde el 2013, durante una votación interna para paliar la crisis de gobernabilidad en la nación.
El nuevo mandatario fue investido por el gobernador general, Peter Cosgrove, quien representa a la jefa de Estado de Australia, la reina Isabel II de Inglaterra, para suceder en el cargo a Malcolm Turnbull.
Morrison, de 50 años y de ideas conservadoras, prometió ante los medios estabilidad y unidad para la agrupación política y el país y aseguró que su gobierno se centrará en “mantener la economía fuerte y a Australia segura”.
Este devoto cristiano y amante del rugby, quien votó contra el matrimonio entre personas del mismo sexo en la consulta postal que se celebró en 2017, necesitará mantener la alianza con los representantes del Partido Nacional para mantenerse en el Ejecutivo.
En la ceremonia, a la que acudió el líder nacional y su número dos, también fue nombrado Josh Frydenberg como secretario de la oficina del Tesoro.
Morrison expresó su intención de ofrecer cargos en su gobierno a Petter Dutton y Julie Bishop, con quienes compitió hoy por el liderazgo del Partido Liberal en la ronda de votaciones que llevaron a cabo los parlamentarios de esta formación, después de que le retirasen el apoyo a Turnbull.
“Intentamos gobernar… así que pienso que nadie debe hacer planes para unas prontas elecciones”, subrayó Morrison, en alusión a los deseos del opositor Partido Laborista, favorito en las encuestas, de que se adelanten los comicios previstos para el 2019.
Morrison indicó que empleará este fin de semana para perfilar su gobierno y añadió que anunciará su composición la semana entrante.
La crisis de los liberales explotó el martes con la primera votación sobre el liderazgo de la formación, en la que se mantuvo a Turnbull frente a Dutton, por entonces ministro de Interior.
Dutton reclamó ayer una nueva reunión extraordinaria para dirimir la cuestión, que fue celebrada esta mañana y en la que Turbull optó por apartarse para dejar el lugar a un nuevo contendiente.
Después de una primera votación en la que quedó eliminada Bishop, ministra de Asuntos Exteriores, Morrison fue nombrado líder liberal al lograr 45 apoyos contra los 40 que sumó Dutton.
Australia tiene previsto celebrar elecciones generales en el 2019.
Las pugnas internas por el poder y los cambios de líderes se han convertido en frecuentes en Australia desde hace casi una década, tanto en los gobiernos de la coalición Liberal-Nacional como en los del Partido Laborista.
Ningún primer ministro de Australia ha logrado completar su mandato desde el 2007 por las pugnas internas por el poder, tanto en la coalición Liberal-Nacional como en el Partido Laborista.
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