ROMA/Italia.- El jefe de Estado italiano, Sergio Mattarella, dio hoy más días a los partidos políticos para que lleguen a un acuerdo antes de decidir sobre una solución a la “urgente” necesidad de formar un gobierno.
Mattarella dijo que, tras la segunda ronda de consultas que celebró hoy, es evidente que “las conversaciones entre los partidos políticos para dar una mayoría en el Parlamento que apoye a un gobierno no han progresado”.
Por ello y ante las próximas obligaciones europeas y el aumento de la tensión en Siria, el presidente de la República afirmó que es urgente que el país tenga un gobierno “con plenas funciones”.
“Esperaré algunos días y valoraré cómo proceder para salir del estancamiento que se ha creado”, agregó Mattarella.
El jefe de Estado concluyó hoy la segunda ronda de consultas, tras el fracaso de la primera, en la que los partidos prácticamente han reiterado sus posiciones.
La coalición de derechas, formada por la Liga Norte, Forza Italia y Hermanos de Italia, reivindicó de nuevo ante Mattarella su derecho a gobernar pero necesita el apoyo de la segunda fuerza política más votada, el Movimiento 5 Estrellas (M5S).
Pero el M5S rechaza sentarse a negociar un gobierno en el que se encuentre Forza Italia y su adversario histórico Silvio Berlusconi.
El veto del M5S al ex Cavaliere se ha convertido en el escollo para que se pueda llegar a un acuerdo.
En estos días, Mattarella tendrá que esperar a que el líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, ceda a las pretensiones del Movimiento 5 Estrellas y rompa la coalición o a que los “grillinos” (M5S) den un paso atrás y acepten la presencia de Berlusconi.
El tres veces primer ministro ya dejó claro ayer en su teatral intervención tras la reunión con Mattarella lo que piensa del partido fundado por el cómico Beppe Grillo y que no piensa quitarse de en medio: “Hay que diferenciar a los verdaderos demócratas de quienes no conocen ni el ABC de la democracia”, en un mensaje dirigido al M5S.
Ante esta situación, los medios italianos hablan de la posibilidad de que el jefe de Estado se decante por elegir una figura política para comenzar una “exploración” sobre cómo crear consensos entre las dos fuerzas políticas.
Lo que parece que Mattarella excluye es la vuelta a las urnas.
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