Adolescentes malcriados e irrespetuosos. Dylan O’Brien, la estrella protagónica de Maze Runner 2: prueba de fuego admitió muy suelto de huesos en una entrevista televisiva que tanto él como el resto del elenco de la secuela de ciencia ficción juvenil, no tuvieron el menor empacho de sustraer ilegalmente reliquias indias de Alburquerque (Nuevo México).
Dylan O’Brien contó su gracia en el programa Live! With Kelly and Michael, donde relató que en una de las zonas de rodaje (en Alburquerque) se les avisó que no podían llevarse tesoros arqueológicos. “Fueron muy estrictos diciéndonos que no nos llevásemos ningún artefacto como rocas o calaveras y todo el mundo cogió cosas”, recordó el joven actor.
Esta indignante declaración levantó el enojo de una joven de 19 años de edad, de nombre Maeve Cunningham, que decidió promover una recolección de firmas para exigirle a Dylan O’Brien y al elenco de Maze Runner 2: prueba de fuego la devolución de todos los objetos indios, así como una disculpa pública por su repudiable conducta.
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“Los derechos de los nativos americanos son importantes para mí. Escuchar que alguien a quien respetas ha hecho lo que ha hecho ignora la cultura y los derechos humanos de alguien me ha decepcionado”, indica Maeve Cunningham.
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