No dejen jugar a Perú, lo sufrió Brasil (Análisis)

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Los condimentos post partido ante Brasil dejan trotes de imaginación con alteraciones y ritmos cardíacos de parte del Scratch que sufrió cuando los peruanos lo pusieron entre las cuerdas.

El arbitraje de Roberto Tobar era previsible que tuviera ese desenlace que influyó en el resultado. Se puso la canarinha  debajo de la indumentaria azul turquesa para tirar de la soga. No cobró un penal de Thiago Silva y de su boca salieron sapos y culebras para intimidar a los nuestros.

¿Qué tendría que haber hecho la bicolor para que el chocolate hiciera su efecto devastador?

En principio puede pensarse que ante una situación así sería imposible arar en el desierto. Brasil en liza para coronar el bicampeonato no podía perder y todo lo que se hiciera sería en vano.

La prensa internacional condena la actuación del chileno Tobar como culpable de la derrota peruana y su pérdida de autoridad para descaradamente inclinar la cancha a favor de los pentacampeones.

Dicho eso, Perú salió del estadio Nilson Santos con la frente en alto, perdió luchando, se retiró con la admiración global al entender que la bicolor puso todo para empatar y Brasil lejos de estirar el 1-0 del primer tiempo con el gol de Paquetá.

En el segundo tiempo cuando Ricardo Gareca abandona la idea de poner cinco atrás en la defensa le cambia la cara al funcionamiento retornando a la habitual formación clásica del 4-2-4 y entonces Brasil ve demonios por todas partes.

Los ingresos de Raziel García y Marcos López, posteriormente lora y Ormeño, provocan que los brasileños aflojen. Se juntan más Cueva, Lapadula, Raziel y Yotún para que la defensa local pierdan el control de la pelota.

La desfachatez de Raziel García de hacerle un túnel a Casimiro fue una invocación a que se repita las pocas veces que Perú puso de rodillas a los creídos sucesores de Pelé.

No se dio, pero bien que Perú saliera con una sonrisa en los labios. Nada que reprochar a la entrega de los muchachos. Un poco más y a estas alturas, Brasil tendría que esperar el resultado de Argentina y Colombia para jugar por la medalla de bronce. (Hugo Laredo Medina).