El Huascarán, la montaña más alta de Perú, conmemorará los 200 años de la independencia del país andino con una gigantesca bandera peruana de 4.000 metros cuadrados que se desplegará desde su cima, a 6.768 metros sobre el nivel del mar.
La extensa bandera rojiblanca, de 200 metros de largo y 20 de ancho, se podrá apreciar desde todo el Callejón de Huaylas, el valle de la región peruana de Áncash ubicado entre la Cordillera Negra y la Cordillera Blanca, donde se encuentra el majestuoso Huascarán, techo de los Andes peruanos.
Así lo anticipó a Efe Víctor Rímac, el montañista peruano más reconocido de Perú, que liderará la expedición integrada por 20 guías profesionales de montaña que subirán a la cúspide con la bandera a cuestas, de unos 300 kilos de peso aproximadamente.
“Lo que queremos es cargar la bandera a pulso hasta la cima y de la misma forma regresar. Es bien epopéyico este tipo de trabajo que vamos a realizar”, comentó Rímac, a quien la pandemia forzó a hacer una pausa en su proyecto de escalar las 14 montañas más alta del mundo, de más de 8.000 metros de altitud.
“Es un proyecto único que nadie ha hecho hasta el momento. Será la bandera más grande que se haya visto en la cima de una montaña al menos en Sudamérica”, añadió.
EN EL MES PATRIO
La expedición llamada “Bandera del Bicentenario” se realizará durante el 5 y el 13 de julio, el mes patrio de Perú, que el día 28 celebrará el bicentenario de su independencia.
Entre la veintena de miembros de la Asociación de Guías de Montaña del Perú (AGMP) que participarán hay personas de Áncash, Arequipa, Cusco y Lima, cuatro regiones que congregan buena parte del mayor sistema de glaciares tropicales del mundo.
Para este proyecto también tendrán la colaboración del Departamento de Salvamento de Alta Montaña de la Policía Nacional del Perú (PNP), el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas del Perú (Sernanp) y de distintos municipios de la zona como Huari, Áncash y Carhuaz.
UNA DEIDAD MILENARIA
Más allá de ser el “techo” de Perú, Rímac explicó que el Huascarán “es más que una simple montaña” para todos los peruanos que viven a su alrededor.
“Se podría decir incluso que es un dios para nosotros. Todas las mañanas abres la ventana y puedes ver la montaña ahí, y esto es muy importante desde la cosmovisión andina por el hecho vivir en un lugar prácticamente bendecido”, detalló Rímac.
“Gracias a las montañas tenemos el agua que nos nutre para tener los alimentos y todo este verdor que no muchos conocen. Nos hace muy felices vivir al lado de montañas y el Huascarán es nuestro apu (dios) más preciado”, agregó.
Por eso la bandera no se quedará permanentemente en la cima con tal de evitar cualquier afectación mayor a un delicado ecosistema que está en riesgo.
SEÑUELO PARA TURISTAS
Para Rímac, el objetivo de este proyecto es también motivar la reactivación del turismo en la región de Áncash, el principal destino de Perú para el turismo de montaña, así como promover la unidad entre los peruanos después de la gran polarización y división que se ha vivido en las recientes elecciones presidenciales.
“He viajado por casi todo el mundo subiendo montañas, y estoy más que seguro que Huaraz y el Callejón de Huaylas tiene todos los atractivos turísticos esenciales para ser la meca del montañismo sudamericano”, afirmó Rímac.
“Con esto va a hacerse visible nuestra región y sus montañas. Acá la gente tiene una opción para disfrutar de la aventura, de las caminatas y de la escalada, entre otras muchas otras cosas”, concluyó.
Además del Huascarán, en la Cordillera Blanca también se encuentran otras emblemáticas cumbres de los Andes peruanos como el Alpamayo, considerada como la montaña más bella del mundo por distintas publicaciones internacionales de montañismo.
EFE