BARCELONA.- Los cuatro presos independentistas catalanes que estaban en huelga de hambre pusieron hoy fin a esa protesta, que comenzaron para denunciar que el Tribunal Supremo español no resolvía sus recursos de amparo sobre su situación.
Se trata de Jordi Sánchez, Jordi Turull, Josep Rull y Joaquim Forn, que cumplen prisión preventiva pendientes de que comience el juicio por el proceso independentista catalán de 2017.
Los dos primeros iniciaron la huelga de hambre hace 20 días y los otros dos la comenzaron tres días más tarde.
La portavoz de los reclusos en huelga de hambre, Pilar Calvo, anunció hoy que desistían, después de que cinco expresidentes regionales de Cataluña y cuatro expresidentes del Parlamento autonómico se lo pidieran en un comunicado conjunto “salvaguardar su derecho a la vida y a la salud”.
En una carta firmada por estos cuatro presos, defienden que la “fortaleza colectiva” que han mostrado con esta acción ha supuesto “un paso importante” en la “restitución” de sus derechos.
Celebran, en este sentido, que “después de todo un año de inacción” el Tribunal Constitucional haya ahora “abierto la puerta de acceso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos”.
Afirman que la huelga de hambre “ha dado visibilidad” a la situación de los líderes independentistas encarcelados por promover un proceso de independencia de la región de Cataluña respecto a España, culminado con una votación en el Parlamento regional en octubre de 2017.
El anuncio del fin de la huelga llega el mismo día en que se reunirán en Barcelona el jefe del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, y el presidente de Cataluña, el independentista Quim Torra, y la víspera de que el Consejo de Ministros se celebre en Barcelona (habitualmente es en Madrid).
También hoy el fiscal del Tribunal de Cuentas presentó una demanda contra antiguos altos cargos de Cataluña, con el expresidente regional Carles Puigdemont a la cabeza, para acusarlos de desviar ocho millones de euros de dinero público a la organización del referéndum de “autodeterminación” 1 de octubre de 2017.
Puigdemont, declarado en rebeldía, sigue huido de la justicia española y reside últimamente en Waterloo (Bélgica).
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