Se desanimó. La cantante británica Sarah Brightman suspendió hasta nuevo aviso su anhelo más ansiado, y por el cual iba a gastar decenas de millones de dólares: Viajar al espacio.
“Sarah Brightman concluyó su entrenamiento. Su suplente, el japonés Satoshi Takamatsu continúa su instrucción en la Ciudad de las Estrellas“, indicó la agencia espacial rusa Roscosmos en un comunicado, que alude al empresario nipón que sucedió a la soprano en las preparaciones.
Sarah Brightman, de 54 años, sorprendió al anunciar el 13 de mayo que abandonaba los entrenamientos, que iniciaron a principios del 2015, aduciendo “motivos familiares”. La cantante dio agradeció al centro de entrenamiento, a Roscosmos y a la corporación Energuia, la fabricante de las naves Soyuz, “por su apoyo y por una maravillosa etapa de mi vida”.
Los entrenamientos, que debían prolongarse durante seis meses, obligaron a la Sarah Brightman a vivir de manera permanente en las afueras de Moscú, y a hacer una pausa en su carrera musical. Trascendió que por esta experiencia estaba dispuesta a pagar 30 millones de dólares.
https://www.youtube.com/watch?v=HBpCqLA8eVo