Los principales sindicatos de trabajadoras del hogar de Perú, un país donde unas 400.000 mujeres y hombres se dedican a labores domésticas remuneradas, presentaron al Congreso de su país una propuesta legislativa que otorga “una mejora sustancial en sus condiciones laborales”.
Los sindicatos informaron en un comunicado remitido a Efe que las mujeres son el 96 % de las trabajadores del hogar y que, a nivel nacional, el 52 % ha migrado de otras localidades del país y afronta una situación laboral precaria “con alto grado de informalidad y vulnerabilidad”.
La ley que regula su trabajo desde 2003 permite que sus contrataciones sigan siendo verbales, lo que incide en que no se respeten las horas de trabajo, ni el pago de la gratificación que ordena la ley y la compensación por tiempo de servicios, así como el seguro social ni las vacaciones.
“A esta realidad se suma que muchas veces son víctimas de discriminación, maltratos y violencia psicológica, física o sexual dentro de sus espacios de trabajo que es el hogar del empleador, ese ambiente privado donde la ley ni la fiscalización por parte del Estado aún no llegan”, se indicó en el comunicado.
Agregó que este 20 de marzo, la viceministra de la Mujer, Silvia Loli, informó ante la Comisión de la Mujer del Congreso que entre enero y febrero de este año las autoridades recibieron 362 denuncias por violencia contra trabajadoras del hogar, entre ellas de abuso sexual, once de los cuales correspondieron a menores de edad.
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Por ese motivo, la Federación Nacional de Trabajadoras y Trabajadores del Hogar del Perú (Fenttrahop), el Sindicato Nacional de Trabajadoras del Hogar del Perú (Sintrahogarp) y la Federación Nacional de Trabajadoras del Hogar (Fentrogarp) presentaron una propuesta legislativa que recoge las recomendaciones del Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Ese convenio, que fue ratificado por el Parlamento peruano en julio de 2018, “establece los principios y derechos básicos para la protección de las trabajadoras y trabajadores remunerados del hogar, y exige a los países tomar medidas para asegurar que este sector gocen de un trabajo decente”, detallaron los sindicados.
Reconoce también el derecho a firmar contratos por escrito, a la jornada de 8 horas y al reconocimiento de horas extras, vacaciones completas de un mes y descanso semanal, un sueldo mínimo, seguro social y pensión.
Además, la protección a los menores, regulación de las agencias de empleo, la fiscalización de espacios de trabajo, protección y el acceso a la justicia ante actos de discriminación y violencia, así como seguridad y salud en el trabajo y libertad sindical.
Estos aportes han sido incorporados al proyecto de “Ley de Trabajadoras y Trabajadores del Hogar en el marco del Convenio OIT 189”, presentado en el marco del Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, que se conmemora este sábado.
“Si bien Perú es uno de los países que ha ratificado el convenio se espera aún, por parte del Congreso, que se cumpla este compromiso con una nueva ley, además de la ratificación del Protocolo de 2014 relativo al convenio sobre el trabajo forzoso que garantice el derecho de hombres y mujeres a un trabajo decente”, indicó la comunicación.
Las últimas estimaciones de la OIT señalan que 25 millones de personas en el mundo son víctimas de trabajo forzoso y la actividad económica en la que se ha identificado el mayor número de estos casos es el trabajo doméstico, concluyó el comunicado.
EFE