En la madrugada del primero de junio, específicamente a las 12:30 a.m., el tradicional aeropuerto Jorge Chávez marcó un hito final. Mediante un acto simbólico de apagar sus luces, la terminal situada en la avenida Faucett concluyó oficialmente sus operaciones después de más de seis décadas de servicio, cerrando así un capítulo significativo para millones de peruanos que lo asociaban con despedidas, bienvenidas, anhelos y emotivos reencuentros.
El momento estuvo impregnado de una profunda emoción. Tras el apagado de las luces, se inició de forma inmediata el traslado de todo el personal operativo, los equipos tecnológicos, la documentación y la logística restante hacia la nueva terminal. Esta moderna y más espaciosa infraestructura, ubicada contiguamente a la antigua, se prepara para recibir próximamente a los pasajeros.
Durante la jornada previa al cierre definitivo, numerosos ciudadanos se congregaron en el aeropuerto para despedirse de sus instalaciones. El ambiente se llenó de abrazos, fotografías, lágrimas y relatos compartidos en voz baja por aquellos que, en algún momento, aguardaron allí a un familiar, dijeron adiós a un ser querido o atesoraron alguna anécdota memorable vivida en sus corredores.
El antiguo aeropuerto Jorge Chávez se había consolidado como un elemento fundamental en la vida cotidiana de Lima y de todo el Perú. Por sus puertas transitaron personalidades del arte, el deporte, así como migrantes, turistas y figuras políticas. Además, fue el epicentro de innumerables coberturas periodísticas, masivos recibimientos y, fundamentalmente, de instantes personales que a partir de ahora pervivirán únicamente en la memoria.
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Si bien el nuevo complejo aeroportuario promete avances tecnológicos, una capacidad operativa superior y una experiencia de viaje modernizada, algunos ciudadanos manifestaron sentir nostalgia por ciertos detalles característicos del antiguo terminal, como su acceso peatonal y esa calidez particular que solo el transcurrir de los años puede conferir a un espacio.
Con la clausura de la terminal de la avenida Faucett, el aeropuerto Jorge Chávez emprende una nueva fase en su historia. No obstante, para muchos, aquel aeropuerto que hoy ha apagado sus luces permanecerá vívido en el recuerdo de todos aquellos que alguna vez recorrieron sus instalaciones.
Foto Andina