BUENOS AIRES (Argentina).- El presidente Javier Milei suspendió la formación de nuevos diplomáticos y deja más de 50 puestos vacantes en embajadas y consulados, informa hoy el periódico digital elDiarioAR.
Al tiempo que cancela el concurso del Instituto del Servicio Exterior de la Nación (ISEN), la Cancillería atraviesa una reconfiguración silenciosa, señala el medio.
La medida genera preocupación por los cargos que quedaron desiertos tras la rotación reglamentaria de diplomáticos. “Lo que está en juego no es sólo una decisión presupuestaria: es la concepción misma de qué significa tener un servicio exterior profesional”, dijeron fuentes diplomáticas a elDiarioAR.
En los pasillos del Palacio San Martín, sede del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, el clima es de incertidumbre y repliegue, el periódico y agrega: “Según diversas fuentes, muchos diplomáticos que debían rotar este año no fueron renovados y sus reemplazos aún no llegaron”.
Sin instrucciones claras, varias representaciones quedaron semiparalizadas. Se estima que hay al menos cincuenta cargos ‒entre embajadas, consulados y agregadurías‒ que quedaron vacantes en las últimas semanas, sin previsión de cobertura ni continuidad operativa.
Aunque no hay confirmación oficial, el dato circula como un hecho entre quienes conocen los movimientos internos de una Cancillería que actualmente comanda Gerardo Werthein, un empresario inexperto en asuntos internacionales y amigo cercano de Milei, según lo describen.
Desde Cancillería justificaron que, tras un análisis de personal y necesidades del servicio, no era imprescindible convocar nuevos ingresos al ISEN. La Jefatura de Gabinete respondió al Congreso que el instituto continúa con sus funciones de capacitación interna y que existen antecedentes, como en 1992 y durante la pandemia, cuando también se suspendieron concursos.
“Esta decisión responde a las limitaciones operativas y tiene incidencia sólo por este año”, adujo el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en su último informe de gestión. Pero diplomáticos de carrera no comparten la mirada oficial: lo leen como una fractura de una institución creada en 1963.
“Es grave que se intente poner en el plano de la discusión ideológica a un área que históricamente fue de excelencia”, fustigó uno de los diplomáticos citado por elDiarioAR, quien solicitó el anonimato. “Para el cuerpo diplomático, la interrupción no es sólo una omisión operativa: es un quiebre simbólico e institucional”.
La suspensión ocurre en paralelo a un rediseño más amplio dentro de la Cancillería. La expulsión de Diana Mondino, reconocida dentro del cuerpo diplomático como una interlocutora razonable en el marco del gobierno libertario, y su reemplazo por Werthein, profundizó la idea de que se busca desmontar las estructuras profesionales del Servicio Exterior.
Werthein trabaja desde hace semanas en un plan de fusiones y recortes de misiones, mientras evita pronunciarse sobre el futuro del ISEN, concluye elDiarioAR.
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Fuente y foto Prensa Latina