Con elegancia, carisma y un fuerte compromiso social, Karla Bacigalupo se coronó como Miss Perú 2025 en una emotiva gala que reunió a 39 candidatas de todo el país. La modelo y actriz de 33 años, actualmente radicada en Los Ángeles, recibió la corona de manos de Tatiana Calmell, Miss Perú 2024, y se prepara desde ya para representar al país en el certamen internacional de Miss Universo.
Bacigalupo representó a la comunidad peruana en el extranjero y se destacó por su elocuente mensaje de empoderamiento femenino, su porte escénico y su labor social. Estos factores fueron decisivos para que el jurado le otorgara la banda que la consagra como la nueva soberana de la belleza nacional.
De Lima a Los Ángeles: trayectoria de una reina con propósito
Graduada en Administración y Gestión de Empresas por la Universidad de Lima, Karla siguió su pasión por la actuación y se trasladó a California, donde completó estudios en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA). Desde entonces, ha participado en diversas producciones independientes y comerciales, construyendo una carrera artística con base en el esfuerzo y la perseverancia.
En sus palabras durante el certamen, Bacigalupo afirmó su deseo de ser un modelo a seguir: “Quiero inspirar a todas las niñas peruanas a que sepan que pueden alcanzar sus sueños si trabajan día a día y valoran la belleza interior”.
Más que una corona: una causa
Además de representar la belleza peruana, Karla asume un rol activo como embajadora de la ONG 1000 Niños de Jesús, organización dedicada a brindar educación y alimentación a niños en situación vulnerable. “La educación es el motor del país. Usaré la plataforma del Miss Perú para dar visibilidad a esta causa tan importante”, declaró en entrevista con Perú21.
La gala fue conducida por Emilia Dides y Carlos Adyan, y culminó con la entrega oficial de la corona y banda por parte de Jessica Newton, directora del certamen.
Con la mirada puesta en Miss Universo, Karla Bacigalupo inicia una nueva etapa como portavoz del Perú ante el mundo, llevando un mensaje de transformación, perseverancia y sensibilidad social.
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