El Borussia Dortmund alemán venció hoy por 4-3 al Mamelodi Sundowns sudafricano y dio un paso de gigante en el Mundial de Clubes. Los goles germanos lo anotaron Felix Nmecha, Serhou Guirassy, Jobe Bellingham y Khuliso Mudau, mientras por los derrotados marcaron Lucas Ribeiro, Iqraam Rayners y Lebo Mothiba
El Borussia del DT Niko Kovac, tras su empate en la primera jornada, logró su primera victoria en este Mundial de Clubes tras imponerse en un partido que comenzó fatal, que levantó gracias a aciertos propios y errores ajenos a partes iguales y casi tira por el sumidero en una segunda parte en la que el cuadro sudafricano casi culmina una remontada de ensueño.
Con unas gradas que fueron cogiendo color en los minutos previos al inicio, el Mamelodi, haciendo caso omiso a la diferencia de nivel que se presuponía entre equipos, salió con un descaro que volvió loco al Borussia. Sacando sin miedo el balón desde atrás y atacando con mucha velocidad por las bandas y al espacio, los sudafricanos sorprendieron a un cuadro alemán que llegaba con dudas tras su estreno ante Fluminense.
Matthews, criado en la cantera alemana, avisó de las intenciones del Mamelodi en el minuto 6, obligando a lucirse a Kobel. Un susto para los teutones que se multiplicó exponencialmente cuando Lucas Ribeiro, en el minuto 11, se deshizo con mucha clase de Anton, dejó atrás en velocidad a Bensebaini y definió de zurda para poner el 1-0.
Pero luego el Mamelodi se pegó un tiro en el pie. Concretamente lo hizo el portero Ronwen Williams, que le regaló un balón con el pie a Nmecha dentro del área para que el jugador del Borussia anotase a placer el 1-1 en el m.16.
Aunque tras ese empate el Mamelodi tuvo un pequeño arrebato de rabia, lo cierto es que esa acción cambió el duelo. Matthews y Ribeiro seguían generando alguna dificultad a la zaga alemana, pero el Borussia comenzó a crecer con balón, presionando más arriba y generando peligro casi en cada llegada. Jobe Bellingham, que afrontaba su primera titularidad en su nuevo club, se mostraba imponente en el centro del campo, dando destellos de su potencia física y clase en algunos regates y conducciones.
Por las bandas, Svensson y Brandt hacían mucho daño a los africanos. De un centro del segundo tras una recuperación en campo rival de Gross llegaría el 2-1, obra de Guirassy tras un centro medido del ’10’ en el m.34. El tanto dejaba al Mamelodi en el filo de la navaja y poco antes del descanso acabó cortándose tras otra acción cuestionable de un Williams que regaló un rechazo hacia el frente en su área que Bellingham aprovechó para estrenar su cuenta en Dortmund y poner el 3-1.
Con lo más difícil hecho, en medio de un calor sofocante que obligó a sus suplentes a ver el primer tiempo desde los vestuarios, el Borussia salió a contemporizar en la segunda parte, con un par de marchas menos. Ello, unido al empuje de los sudafricanos, dio pie a numerosas pérdidas de balón en zona peligrosa que generaron ciertas dudas sobre el destino del partido, con Kobel salvando un mano a mano ante Rayners, aunque la acción quedó anulada por fuera de juego.
Pese a las dificultades, el choque parecía quedar visto para sentencia en el m.59 después de que Mudau, tras el enésimo centro de Svensson desde la izquierda, introdujera el esférico en su propia portería (m,59). Un 4-1 quizá cruel por el inicio de partido de un Mamelodi que, eso sí, tiró de orgullo para reaccionar casi de inmediato y abrir una ventana a la esperanza cuando Rayners, en el m.62, ponía el 4-2 de cabez, tras una acción a balón parado.
Entre cambios e interrupciones, el choque fue perdiendo ritmo, con un Borussia que esperaba con calma el paso de los minutos sin hacer demasiado énfasis en atacar. Esa falta de ambición le pudo salir bien caro al cuadro alemán, especialmente cuando tras la enésima pérdida de la segunda parte en campo propio, Mothiba ponía el 3-4 para dar emoción y suspense al añadido.
El mismo fue de seis minutos. 360 segundos que se le hicieron largos a un Dortmund que, con más sufrimiento de lo esperado tras situarse con tres goles de ventaja, selló un triunfo que le deja con pie y medio en octavos de final
Fuente Besoccer / foto X