Exponerse por muchas horas a las pantallas de dispositivos electrónicos, como smartphones (celulares) y tablets, ha permitido el incremento de los casos de “ojo seco”. Se estima que alrededor del 40% de las consultas de oftalmología son a causa de esta condición, que es difícil de identificar por el paciente debido a que sus síntomas se confunden fácilmente con otras enfermedades visuales.
Quienes padecen de ojo seco pueden sentir sensación de arenilla y/o cuerpo extraño en el ojo, ardor, quemazón, aspereza, sensibilidad a la luz, visión de halos de colores, ojos llorosos y picazón leve.
Este problema de salud de carácter inflamatorio se origina por la falta de lubricación ya sea por disminución de la producción de lágrimas o por exceso de evaporación de las mismas.
Las lágrimas juegan un rol fundamental en el cuidado de la salud de los ojos. Luego de cada parpadeo, forman una película sobre el ojo y se mantiene estable alrededor de 10 segundos. Esta película lagrimal humecta, aporta nutrientes y protege al ojo de las sustancias tóxicas que se encuentran en el aire.
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