En la investigación participaron más de 60 universidades de Sudamérica, Reino Unido y otros países, y monitorearon el tamaño de los árboles en 188 parcelas permanentes de esta región catalogada como uno de los pulmones del mundo.
Los investigadores constataron el crecimiento sostenido de los árboles a pesar de las amenazas del cambio climático.
Tal crecimiento coincide con el beneficio que supone la fertilización derivada del aumento del dióxido de carbono atmosférico, lo cual significaría que este estimularía el crecimiento persistente, demostrando una vez más la resiliencia de la naturaleza, reseñó el portal noticiasambientales.com.
Los bosques tropicales amazónicos albergan algunos de los árboles más altos y majestuosos del planeta, gigantes que pueden superar los 60 metros de altura, equivalente a un edificio de más de 20 pisos.
Su estructura robusta les permite competir por la luz solar en un ecosistema denso y competitivo, de acuerdo con la fuente.
El estudio destaca que el cambio climático y la creciente disponibilidad de recursos como el dióxido de carbono están modificando el funcionamiento de los bosques a nivel mundial, pero los efectos de estos cambios en la estructura forestal no están claros.
Señala que los hallazgos aquí descritos ofrecen un punto de referencia importante para comprender la dinámica histórica y futura del sumidero de carbono amazónico.
Por su parte, noticiasambientales.com apunta que la diversidad arbórea de la Amazonía es tan vasta que cada hectárea puede contener cientos de especies distintas.
Estos árboles, además de su altura, poseen raíces profundas y troncos de gran diámetro que almacenan carbono y sostienen una red de vida esencial para el clima global y la biodiversidad del planeta.
Fuente y foto Prensa Latina