México junto con Pakistán, India y Tailandia, se convirtió en paraíso para los vientres de alquiler, ante los vacíos legales que permiten a empresas lucrar con ese negocio, alertó este lunes una comisión de la Cámara de Diputados azteca.
En el informe de la Comisión Especial Contra la Trata de Personas de la Cámara de Diputados de este país se menciona que el problema es más grave en Tabasco (Sureste del país), que desde hace 18 años permite la renta de vientres.
Sus cifras señalan que tan sólo el año pasado 1.200 españoles acudieron a esta zona con la intención de encontrar una mujer a la que pudieran pagar por tener un hijo.
Los precios del alquiler varían y pueden ir desde 7.800 dólares hasta 20.000, dependiendo del acuerdo al que se llegue o si existe alguna compañía intermediaria que arregle el trato y se ocupe de los trámites legales.
Incluso en Internet se pueden encontrar una serie de empresas que ofrecen el servicio para parejas de España y el resto de Europa, heterosexuales o del mismo sexo, en un momento en el que la adopción por parte de parejas homosexuales ha despertado un fuerte debate en la sociedad mexicana.
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“Nuestros servicios legales provienen de uno de los bufetes de abogados con más experiencia de México en este campo. Nuestro equipo de asesores personales han pasado en su propia carne por procesos de subrogación y por ello tienen un conocimiento único y de primera mano sobre los desafíos a los que los nuevos padres se enfrentarán”, dice la página web de una de estas compañías.
La presidenta de la Comisión, Julieta Fernández Márquez, del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), advirtió que en México existe el riesgo de que la renta de vientres se convierta en trata de personas, si hay alguien más que aproveche esta acción para su propio lucro.
Uno de los principales vacíos es la falta de una ley a nivel federal que regule el mercado y evite la explotación de mujeres o los abusos por parte de empresas que se dedican a la asesoría de las parejas interesadas. En abril de este año, se votó en el Senado una legislación que prohíbe la subrogación de vientres con fines de lucro y para extranjeros. Pero aún se sigue analizando en comisiones en Diputados y se demora su aprobación. (ECHA- Agencias)