El Penal de Barbadillo, ubicado en la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes), contará con un amplio y moderno espacio totalmente equipado con el fin de facilitar la labor que se realiza en las audiencias judiciales en dicha sede y brindar un adecuado y eficiente servicio de la administración justicia, anunció el presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo.
La nueva sala de audiencias y videoconferencias de la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema en la Diroes, que estará lista en aproximadamente tres meses, servirá para el juzgamiento de los delitos que se imputan contra los expresidentes de la República.
Este espacio tendrá un área de 760 m2 donde se implementarán ambientes destinados para magistrados, otros para los acusados y su defensa. Habrá una zona para el público y otra especialmente para la prensa, además de una sala de testigos y sala de espera para los acusados que hoy son exaltos funcionarios del Estado.
Al firmar el convenio con el ministro del Interior, Vicente Romero, el titular del Poder Judicial recordó que el país tiene varios expresidentes juzgados por delitos de corrupción. “Por eso resulta de suma importancia contar con instalaciones adecuadas que permitan sus respectivos juzgamientos y acceder al proceso conociendo de cerca el desarrollo del mismo. La ciudadanía debe tener claro que se dictarán sentencias justas y respetando el debido proceso, y, por supuesto, con decisiones severas si se incurrió en conductas probadas de delito”, afirmó.
Según el Poder Judicial, la habilitación de la nueva sala de audiencias se desarrolla dentro de la transparencia, modernización tecnológica y simplificación administrativa, cumpliendo los objetivos trazados a fin de contribuir con la administración de justicia y la seguridad ciudadana.
(JA)
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