El inicio del recorrido peruano en la Eliminatoria al Mundial del 2026 ante Paraguay dejó sensaciones distintas, de un desencajado primer tiempo a un segundo período alentador.
Tuvo que ver el buen ojo de juan Reynoso para un replanteo oportuno y ese modo evitar el derrumbe completo luego de haber pasado devastadores momentos en la primera parte ante los de Guillermo Barros Schelotto.
Reynoso llegó al partido contra los paraguayos con muy poco crédito con una “morosidad” anticipada y astillas en los bolsillos para afrontar su futuro como técnico de la selección en pocos minutos.
Ricardo Gareca en su momento de gloria tuvo un cheque en blanco, sobre todo después de la clasificación al Mundial de Rusia 2018.
𝗗𝗲𝗯𝘂𝘁 𝗲𝗻 𝗖𝗹𝗮𝘀𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝘁𝗼𝗿𝗶𝗮𝘀 ✅
𝗩𝗮𝗺𝗼𝘀 𝗽𝗼𝗿 𝗺𝗮́𝘀, 𝗝𝗲𝘀𝘂́𝘀 🏰#UnSentimientoQueNosUne pic.twitter.com/vLlMQFDqZE
— La Bicolor (@SeleccionPeru) September 8, 2023
Reynoso empezó con un préstamo apenas sustancioso en su tarea. De hecho no haber ganado nada lo condicionaba a pasar al descrédito sin saldo alguno.
El ex entrenador de Cruz Azul se jugó la vida en ese segundo tiempo contra los paraguayos en Ciudad del Este en el que pudo reconstruir el barco que encallaba en la orilla cercana a la debacle.
Claro, tuvo en Pedro Gallese un aliado que lo secundó con atajadas formidables y la labor de Renato Tapia para convertirse en el quinto zaguero disfrazándose de bombero para apagar el incendio.
Los ingresos de Aldo Corzo, Wilmer Cartagena, Jesús Castillo y Marcos López aportaron la vitamina oportuna para una inyección para revivir a la casi desahuciada bicolor.
El primer examen aprobado raspando quedó en recuerdo y lo que vendrá, cerquita nomás, teniendo como rival a Brasil. Sabremos entonces si Reynoso se queda más moroso que nunca o cobra en paila el crédito que significa darle al Scratch un poco de chocolate de su propia medicina.
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