Las comunidades campesinas de la provincia andina de Chumbivilcas, en la región peruana de Cusco, retomaron este fin de semana su protesta contra la gran mina Las Bambas, productora del 2 % del cobre mundial, tras denunciar que la minera incumplió los compromisos asumidos con la población.
Según informaron medios locales, los dirigentes de las poblaciones aledañas al complejo minero volvieron este sábado a bloquear las vías del denominado corredor minero, una carretera por la que circulan los camiones cargados con el mineral extraído de la mina.
Esta vez, las comunidades acusan a la minera MMG Las Bambas de no avanzar en las conversaciones sobre el impacto ambiental de su operación, tal y como se había acordado previamente.
El diario La República detalló que, como parte de las mesas técnicas instaladas para atender las demandas de la población, los dirigentes comunales mantuvieron el último viernes una reunión con representantes de la empresa y del Ministerio del Ambiente.
En ese encuentro, Las Bambas habría acudido sin la propuesta económica de apoyo a la población que esperaban las comunidades, lo que motivó la reanudación de la protesta.
La medida iniciada este sábado llega apenas un mes y medio después de que el pasado 5 de octubre el exministro de Energía y Minas Iván Merino anunciara que Las Bambas había logrado acuerdos con las comunidades de Chumbivilcas para evitar protestas contra el yacimiento.
El mayor malestar de las comunidades aledañas a la mina es el constante tránsito de camiones de gran tonelaje que atraviesan sus comunidades para transportar el cobre, lo que genera polvareda cerca de las zonas habitadas.
Por ello, exigen el pago de las indemnizaciones de daños y perjuicios por impactos ambientales, sociales y culturales, así como el pago de los derechos de servidumbre minera.
En esa línea, las comunidades también demandan ser consideradas como proveedores de bienes y servicios de la empresa minera y como área de influencia directa ambiental y social de la misma mina.
VEINTE PROCESOS DE DIÁLOGO
Desde que empezó en 2017 el conflicto que involucra a comunidades campesinas de las regiones de Apurímac y Cusco con la minera Las Bambas, se han desarrollado 20 procesos de diálogo.
Las Bambas, traspasada en 2014 de la suiza Glencore a MMG, de capitales chinos, por unos 10.000 millones de dólares, se encuentra en la provincia de Cotabambas, en la región Apurímac, a 4.000 metros de altitud.
El paso de los camiones por las comunidades aledañas, que no estaba previsto inicialmente en el proyecto, ha sido el motivo de un conflicto, con periódicas protestas que tuvieron graves picos de violencia en los que murieron cuatro personas entre 2015 y 2016.
El yacimiento tiene reservas calculadas en 6,9 millones de toneladas de cobre, de las que 452.000 fueron extraídas en 2018, lo que supone un 2 % de las 20 millones de toneladas que se produjeron a nivel mundial y un 18,8 % de las 2,4 millones de toneladas que aportó Perú, el segundo productor mundial de cobre, plata y zinc del planeta.
EFE- Foto Andina (Referencial)