Amnistía Internacional (AI) demandó hoy a las autoridades del Perú el “cese inmediato del uso excesivo de la fuerza” contra las protestas antigubernamentales en las que han perdido la vida 44 manifestantes desde que estas se desataron el pasado diciembre.
“Exigimos a las autoridades el cese inmediato del uso excesivo de la fuerza y que estas muertes no queden en la impunidad. Rechazamos también los ataques que han sufrido periodistas y demandamos al Estado garantizar la labor de las/los periodistas”, subrayó AI en Twitter.
Recordó que, en las protestas del último jueves en diversas regiones del país, fallecieron dos manifestantes más, uno en la región de Puno (frontera con Bolivia) y otro en Arequipa.
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A esas 44 muertes, se añade la de un policía quemado vivo en Puno y 14 personas más que han muerto por distintas razones vinculadas a los bloqueos de carreteras de parte de los manifestantes, entre ellas un bebé nonato además de cuatro migrantes de Haití.
“Recordamos que, ante hechos de violencia, las fuerzas del orden deben individualizar la respuesta hacia los responsables, bajo principios de estricta necesidad y proporcionalidad, así como rendición de cuentas, y en ningún caso, reprimir de manera indiscriminada”, resaltó el mensaje de Amnistía Internacional.
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Hoy viernes se ha vivido una nueva jornada de protestas con una manifestación en Lima, adonde han participado ciudadanos de diversas partes del país, así como en Cusco, Arequipa y Puno.
En esta región un grupo de manifestantes antigubernamentales incendiaron el Centro Binacional de Atención en Frontera (CEBAF) de Desaguadero, centro aduanero, indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
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En Arequipa, intentaron asaltar el terminal aéreo, cerrado por seguridad.
En Cusco, decenas de manifestantes ingresaron hoy a la sede de la empresa minera Antapaccay, donde ocurrió un incendio, presuntamente generado por la quema de pastizales y daños en la infraestructura, según medios locales.
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