Tía María: obispos piden fin de violencia en Islay

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La Conferencia Episcopal Peruana (CEP) llamó hoy a poner fin a la violencia, tras instar a que se respete los derechos humanos y la paz en la provincia de Islay, en Arequipa, donde un sector protesta contra el proyecto Tía María.

“No debe haber más víctimas. No más violencia. Llamamos a las fuerzas del orden y también a la población civil a reafirmar el respeto por los derechos humanos y por la paz. Es sumamente necesario retomar el diálogo alturado, con la buena voluntad de todas las partes implicadas, que deben participar para que se restablezca la paz”, detalla en un comunicado.

La Conferencia Episcopal Peruana lamentó los hechos de violencia que ocasionaron la muerte de los civiles Victoriano Huayna y Henry Checlla, y en los cuales se hirió a miembros de la Policía Nacional, uno de los cuales falleció este sábado.

“Llamamos a una profunda reflexión que desemboque en una pronta acción en defensa de la vida, la construcción de la paz y la justicia”, detalla el pronunciamiento de los obispos sobre la situación en Islay.

La  destaca la importancia de proyectos como Tía María al implicar altos niveles de inversión para la economía de la región y del país, creación de puestos de trabajo, importantes obras de infraestructura y el aporte a los recursos públicos, especialmente regionales y locales, en favor de la calidad de vida.

Expresa, no obstante, su preocupación por las poblaciones que por años viven de la agricultura, dinamizada en los últimos tiempos, la cual consideró necesario promover y proteger, pues favorece la alimentación y una muy importante generación de puestos de trabajo, que mejora la economía familiar.

“En el importante Valle del río Tambo, para favorecer la agricultura, es necesario proteger el agua tanto superficial como del subsuelo. La calidad del aire y de la tierra es también esencial para lograr los necesarios niveles de productividad. Nuestra mirada debe incluir el bien común, el cuidado de la creación, un desarrollo verdaderamente humano, sostenible y solidario”, recalca la Conferencia Episcopal Peruana.

Asimismo, ratifica su voluntad de respaldar y apoyar las iniciativas destinada a restablecer el diálogo y la construcción de paz.

El comunicado es suscrito por monseñor Salvador Piñeiro García-Calderón, arzobispo de Ayacucho y presidente de la Conferencia Episcopal Peruana.

Foto Andina.

 

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