Ariel Beltramo anotó 40 goles en Chile vino a Universitario y no hizo un solo gol

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Universitario, bicampeón peruano, intentaba reforzarse para afrontar con éxito la Copa Libertadores de 1994 ante Alianza Lima, y los ecuatorianos Emelec y Barcelona.

Una vez confirmado el fichaje de los hondureños Dolmo Flores y César Obando, la dirigencia estudiantil, con Jorge Nicolini a la cabeza, le puso la puntería al goleador de la “U” chilena. Era entonces, el sustituto ideal ante la partida de Ronald Baroni a Deportivo Municipal, y no se escatimó al momento de lograr su participación.

Ariel Ceferino Beltramo, nacido en Brinkmann (Córdoba, Argentina) el 20 de agosto de 1969, se inició en el Talleres de Córdoba de su país en 1985. Luego pasó al Lanús, con el que logró el ascenso a primera división en 1989, marcando 8 goles en 20 partidos.

El salto lo dio al siguiente año, cuando fue contratado por el poderoso Ríver Plate que era dirigido por Daniel Passarella –se dice que el técnico lo tenía por delante de Batistuta en sus gustos-, jugando en la temporada 90/91 un total de 12 encuentros y marcando 4 goles.

Es con los millonarios que juega su primera Copa Libertadores, anotando un gol en semifinales ante el Barcelona ecuatoriano. Tras un breve paso por el Deportivo Armenio, recala en la Universidad de Chile –equipo grande en transición, que buscaba alejarse de la parte baja de la tabla-, donde llegó a ser conocido como el ‘Ariel de los goles (azules)’ por los 40 tantos que marcó en las temporadas 92/93.

A partir de su llegada –y la de otros jugadores- la “U” de Chile no volvió a mirar la tabla desde abajo, sino al contrario, se metió en la lucha por el campeonato.

Fueron estos pergaminos los que alimentaron la esperanza, de la hinchada merengue, al conocerse el fichaje de Beltramo –de 24 años-. Sin embargo, las cosas no salieron bien, por lo que tras dos meses en Odriozola y en plena Copa Libertadores (sólo participó de la primera ronda de Copa), Ariel dejó el club sin poder haber marcado algún gol.

Luego de su salida de Odriozola, Beltramo recaló en el Gimnasia y Esgrima de la Plata. En 1996, volvió a Chile, esta vez al Palestino con el cual marcó 11 goles en 25 partidos de la Primera División.

Las temporadas 97/98 fue jugador del Municipal de Guatemala, con el que salió goleador –y subcampeón- de la ‘Copa Pepsi’, anotando un total de 14 goles en 20 encuentros. El mismo año 98, fue transferido al Tolima de Colombia con los que consiguió 6 tantos en 15 partidos. El salto a Europa llegaría en 1999, cuando fichó por el Maccabi Ahi Nazareth de la segunda israelí, logrando inflar las redes 10 veces en 25 partidos. A partir del 2000, pasó por distintos clubes del ascenso

Foto: Internet/medios

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