CIDH: Los autócratas tienen una obsesión con la prensa y el control de medios

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Lo que ha sucedido en Venezuela es una situación similar a la del periodo de gobierno del exdictador peruano, Alberto Fujimori, donde hubo una serie de acciones del Estado para suprimir la libertad de expresión, afirmó Edinson Lanza, relator para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

“Lo que está claro es que en el Perú de Alberto Fujimori o en el caso de Venezuela ahora estuvo precedido no de un acto único, sino de una serie de acciones del estado para suprimir la libertad de expresión”, dijo en el programa No Hay Derecho de Ideeleradio.

“Y en el caso de Perú fue un caso emblemático en este sentido, con la compra de medios de comunicación, con el ataque a los periodistas que no se sometían, y con incluso la revocación de la licencia de un canal de televisión”, dijo.

El caso Diarios Chicha es emblemático

El relator de la CIDH sostuvo que cuando un gobierno autoritario tiene el poder, lo que primero que se suprime es la libertad de expresión y que las primeras víctimas resultan ser los periodistas y los medios de comunicación.

“Este caso de la prensa chicha del Perú es emblemático, es decir el uso del poder fiscal del Estado, el uso de la atribución de publicidad oficial, el uso de la licencia, todos recursos legítimos, pero que son utilizados para premiar y castigar a la prensa, y obviamente interferir en una prensa libre e independiente”, indicó.

Los autócratas y su obsesión con la prensa

El relator para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sostuvo, además, que los autócratas tienen un obsesión con la prensa y por controlar los medios de comunicación.

“Los autócratas tienen una obsesión con la prensa, y la obsesión de editar lo que dicen los medios por controlar los contenidos y el mensaje es parte de una teoría populista y de una teoría autoritaria de concentración del poder”, argumentó.

“No se cree en la diversidad del pluralismo, no se cree en el debate público; se trata de anular los intermediarios, y se va directamente a la gente con el mensaje de mentira, con el mensaje falso, con el mensaje manipulado. Y, en ese caso, muchas veces la prensa es instrumentalizada”, refirió.