WASHINGTON- En una breve carta al Congreso de Estados Unidos, el presidente Barack Obama manifestó su apoyo al retiro de Cuba de la lista elaborada por el Departamento de Estado de los países que apoyan el terrorismo, un paso clave para las relaciones bilaterales.
En ese sentido expresó que estaba en condiciones de certificar que “el gobierno de Cuba no ha proporcionado soporte al terrorismo internacional” e insiste en la “intención de remover” a la isla de esa lista, uno de los obstáculos para el avance del proceso de restablecimiento de relaciones diplomáticas.
En el breve mensaje, de apenas cuatro párrafos, Barack Obama subrayó que “el gobierno de Cuba ha ofrecido garantías de que no apoyará actos de terrorismo internacional en el futuro”.
En una nota oficial, la Casa Blanca informó que la normativa legal determina que el presidente debe informar al Congreso sobre el caso 45 días antes de que cualquier decisión entre en vigor.
El problema es que, en ese período, el Congreso, dominado por los adversarios republicanos de Barack Obama, puede bloquear medidas mediante una resolución bicameral.
La Casa Blanca recordó que “luego de una cuidadosa revisión” de la permanencia de Cuba en esa lista, “el Departamento de Estado concluyó que Cuba reúne las condiciones para la rescisión de designación como estado promotor del terrorismo”. (ECHA- Agencias)