LUXEMBURGO.- Los ministros de Asuntos de Exteriores de la Unión Europea este lunes debatirán la propuesta de España para promover desde el bloque una “solución política” en Venezuela, que haga énfasis en el diálogo y no en las sanciones.
La propuesta que fue admitida por la alta representante de Política Exterior Federica Mogherini es promovida por el gobierno de España, cuyo canciller Josep Borrell ha señalado que está de acuerdo en exigir democracia al régimen de Nicolás Maduro, pero no a través de sanciones sino mediante el diálogo.
El debate se realizará este lunes durante un Consejo de ministros de Asuntos de Exteriores, que tendrá el formato de un almuerzo de trabajo. Mogherini decidió incluir el tema de Venezuela a solicitud de Francia, Italia y Portugal, a pesar de la negativa de España.
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En junio pasado, Borrell ya había dicho que el gobierno del socialista Pedro Sánchez está interesado en encontrar una solución política a la crisis de Venezuela.
“El nuevo Gobierno español va a poner más si cabe el énfasis en la necesidad de encontrar soluciones políticas a la situación en Venezuela que no se van a resolver únicamente a base de sanciones”, señaló Borrell tras asistir en junio a su primera reunión de ministros de Exteriores de la UE, reseñó el diario madrileño El País.
También, el pasado 25 de septiembre durante un encuentro para tratar el tema del éxodo venezolano, Mogherini había adelantado que “la única salida es una solución política negociada”, aunque dejó claro que la UE no sería mediadora en un eventual diálogo, pero estudiará como “acompañarlo”.
3 de septiembre de 2018
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Fuentes diplomáticas comunitarias señalaron que se espera que de la reunión de este lunes salgan varias propuestas “sobre cómo promover el diálogo político en Venezuela y cómo abrir cauces de colaboración”.
Desde la UE se considera que el bloque no puede permanecer impasible ante un éxodo que ha provocado una crisis en Sudamérica.
Mogherini había agregado además que la preocupación de la UE por lo que pasa en Venezuela es inevitable porque “cientos de miles de ciudadanos venezolanos son también ciudadanos europeos”.
La posición de España significa un cambio respecto a la que sostuvo el anterior gobierno de Mariano Rajoy, que más bien impulsó el castigo diplomático desde la UE.
No se espera que de la cita de mañana salga un plan concreto respecto a Venezuela, pero sí que sea el inicio de un viraje de la UE sobre el país caribeño, que incluya a los países que prefieren seguir manteniendo una posición dura frente a Caracas. (ECHA- Agencias)