La zona fronteriza que conecta los complejos de Santa Rosa (Tacna) y Chacalluta (Arica) amanece tranquila y sin la vista de extranjeros en la carretera. No obstante, se mantiene un fuerte despliegue de fuerzas del orden para disuadir cualquier intento de ingreso ilegal al territorio peruano.
Actualmente, la Línea de la Concordia está custodiada por más de 30 agentes policiales peruanos, cubriendo ambos sentidos de la vía. En el lado chileno también se puede ver la presencia de Carabineros. Adicionalmente, efectivos del Ejército del Perú prosiguen con las tareas de vigilancia en la pampa adyacente.
El grupo de más de 50 migrantes que el día anterior intentó acceder al Complejo Santa Rosa con la meta de seguir su recorrido hacia Perú, tuvo que regresar a Arica. El motivo fue la imposibilidad de avanzar al no cumplir con los requisitos para su ingreso.
Crisis en frontera con Chile: los policías no pueden contener el ingreso de migrantes
👉 Movilización y retorno forzado de extranjeros
Debido a que no hay personas esperando en la zona, la carpa de servicios de salud que había sido montada por la Dirección Regional de Salud (Diresa) de Tacna fue movida. La nueva ubicación es el antiguo complejo fronterizo Santa Rosa. Lo mismo ocurrió con la ambulancia y el personal del SAMU.
Mientras tanto, la Municipalidad de Arica envió equipos de limpieza para recolectar la basura y otros desechos de los bordes del camino. Estos residuos fueron abandonados por los migrantes que permanecieron detenidos en el área durante la jornada anterior.
🧹 Arica inicia limpieza de residuos dejados por viajeros
Un vocero del Ministerio del Interior, quien pidió no ser identificado por el momento, manifestó que «el control es riguroso en toda la extensión de la frontera para resguardar la seguridad nacional».
Foto internet-medios- Video TV Perú