Más de 400.000 independentistas se reúnen en Barcelona por el Día Nacional de Cataluña

shadow

 

El movimiento independentista de Cataluña volvió a manifestarse en las calles de Barcelona con motivo del Día Nacional de Cataluña.

La ‘Diada’ de este año recuperó el tradicional formato multitudinario con una marcha convocada por la Asamblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural, que contabilizaron más de 400.000 manifestantes, quienes desfilaron por la ciudad bajo el lema “Luchemos y ganemos la independencia” en la primera gran movilización tras la pandemia.

Fue la primera fiesta nacional desde que el Gobierno español concediera el indulto a los nueve líderes encarcelados en 2017 por el referéndum y la declaración unilateral de independencia.

“Nos habían dicho que las calles estarían vacías. Pero nunca habéis desfallecido y os estaremos eternamente agradecidos”, afirmó el activista condenado y presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, durante el acto de clausura de la movilización.

Cuixart, que como otros indultados participó en varios actos a lo largo de la jornada, prometió “nunca renunciar a los derechos políticos del pueblo de Cataluña“.

En la manifestación participaron el presidente catalán, Pere Aragonès, sus consejeros del Gobierno y la presidenta del Parlamento, Laura Borràs, entre otras personalidades.

Los asistentes marcharon desde la Plaza Urquinaona, principal escenario de los disturbios de otoño de 2019, hasta las puertas del parque de la Ciutadella, donde se encuentra el Parlamento de Cataluña.

Muchos independentistas acudieron a la convocatoria con el ánimo de demostrar que “el sentimiento independentista continúa”, según explicó un manifestante.

“Hemos venido a demostrar a todos los partidos políticos que siempre están en nuestra contra que están equivocados, que continuaremos aunque ellos lo nieguen”, sostuvo este manifestante.

Adrià, también de Barcelona, afirmó “exigir” la independencia porque “así se votó y se ganó en el referéndum de 2017”, la consulta ilegalizada por la Justicia española en la que participaron millones de catalanes.

Tras el referéndum el entonces presidente, Carles Puigdemont, se marchó a Bélgica, mientras que el vicepresidente Oriol Junqueras y otros miembros del Gobierno catalán fueron juzgados y condenados por el Tribunal Supremo.

El movimiento independentista llegó a este Día Nacional dividido por la mesa de diálogo que reunirá a los gobiernos de Cataluña y España la próxima semana.

Mientras que el partido del presidente Aragonès apuesta por la negociación con Pedro Sánchez, sus socios de gobierno, liderados por Puigdemont, auguran el fracaso.

El dirigente catalán llevará a la mesa la petición de un referéndum de autodeterminación, una posibilidad que el Gobierno español descarta por completo.

“Estamos ante un proceso lleno de obstáculos que necesitará tiempo, unidad y perseverancia”, reconoció Aragonès durante el tradicional mensaje presidencial por la Diada.

El presidente Pedro Sánchez, que todavía no confirmó su asistencia a la reunión en Barcelona, felicitó el Día Nacional en las redes sociales pidiendo el “reencuentro, el afecto y la concordia” en Cataluña. (Sputnik)