Brad Pitt regresa a la acción en F1: La película, un drama de velocidad y mentoría en el mundo de la Fórmula 1

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Brad Pitt vuelve a la pantalla grande con F1: La película, una producción dirigida por Joe Kosinski (Top Gun: Maverick) y coproducida por Lewis Hamilton y Jerry Bruckheimer, que promete ser la cinta de automovilismo “más inmersiva y visceral jamás hecha”, en palabras de su propio director.

En esta historia, Pitt interpreta a un expiloto que regresa a las pistas como mentor de una joven promesa del automovilismo, encarnada por Damson Idris. El actor reveló que llevaba décadas buscando protagonizar una película sobre carreras: “Ya fueran motos o autos, siempre había algo que lo impedía. Pero esta vez fue diferente. Fue una experiencia extraordinaria”, declaró durante una conferencia internacional en México, donde participó la cadena RPP.

El proyecto se gestó con un enfoque realista e inmersivo. Según Pitt, el equipo pasó casi dos años entrenando y rodando en circuitos reales, integrándose en el ecosistema de la Fórmula 1: “Estar dentro del auto, sentir las fuerzas, la física… eso no se puede fingir. Al final, Damson y yo ya éramos bastante buenos conduciendo”, bromeó.

El elenco también incluye a Kerry Condon, quien da vida a una ingeniera encargada de diseñar un monoplaza capaz de dominar las curvas más peligrosas. Su personaje refleja el rol crucial de la tecnología y la estrategia dentro de la alta competencia automovilística.

Damson Idris, por su parte, relató que su preparación comenzó con simuladores y videojuegos de F1, y luego avanzó a entrenamientos reales en circuitos como Silverstone, Rockingham y Palm Springs: “Pasé de F4 a F1. Me sumergí totalmente en este mundo”. Incluso bromeó que la pausa por la huelga de actores los benefició: “Cuando volvimos a Abu Dabi, nos dijeron que nos veíamos mejor. Es que tuvimos más tiempo para entrenar”.

F1: La película promete combinar la adrenalina de las carreras con una historia emocional sobre segundas oportunidades y pasión por la velocidad, en un universo que Pitt calificó como “adictivo”.

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