BRASILIA (Brasil).- El exparlamentario brasileño Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro, vio cancelado hoy su pasaporte diplomático tras perder su mandato, decisión tomada por la Junta Directiva de la Cámara de Diputados.
El exdiputado fue destituido por ausencias, pero conserva sus derechos políticos.
Según información de la Cámara Baja, la esposa y los hijos del exlegislador también perdieron sus pasaportes diplomáticos válidos. Eduardo Bolsonaro y su familia se encuentran en Estados Unidos desde principios de año.
El pasaporte diplomático es un documento emitido a las autoridades brasileñas y a sus dependientes.
La información fue confirmada en el sitio web oficial de la asamblea legislativa.
En redes sociales, Eduardo Bolsonaro declaró que está considerando obtener un pasaporte de apátrida para continuar viviendo en Estados Unidos.
De acuerdo con la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados, las personas errantes son aquellas cuya nacionalidad no es reconocida por ningún país.
La condición puede ocurrir por diversas razones, como la discriminación contra minorías en la legislación nacional, fallos en el reconocimiento de la ciudadanía tras procesos de independencia o conflictos entre las leyes de diferentes países.
El reconocimiento de apátrida garantiza la protección internacional y, posteriormente, puede facilitar el proceso de naturalización, siempre que se cumplan ciertos requisitos.
La renuncia voluntaria a la nacionalidad y la ausencia de solicitud de una la que la persona tenga derecho no se consideran casos de apátrida.
El 18 de diciembre, la Mesa Directiva de la Cámara Baja resolvió retirar el mandato del descendiente de Bolsonaro tras constatar que superó el tope de ausencias permitido por la Carta Magna.
La decisión fue adoptada bajo la conducción del presidente del cuerpo, Hugo Motta, y alcanzó también al diputado Alexandre Ramagem, del Partido Liberal.
Ambos incumplieron el requisito constitucional de asistencia mínima a las sesiones ordinarias. En el caso de Eduardo Bolsonaro, la pérdida de la banca emergió luego de que no presentara defensa dentro del plazo otorgado, pese a haber sido advertido públicamente sobre la gravedad de su situación.
Eduardo Bolsonaro acumuló 59 faltas desde marzo, período en el que se instaló en Estados Unidos para realizar gestiones políticas orientadas a presionar contra el Estado brasileño, acciones que derivaron en una imputación del Supremo Tribunal Federal por presunto intento de coacción a la Justicia.
Tales actuaciones se enmarcan en un contexto judicial más amplio que involucra a su padre, condenado a 27 años y tres meses de prisión por liderar un plan para desconocer el resultado de las elecciones de 2022 y promover un golpe de Estado contra el actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva.
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Fuente y foto Prensa Latina