River Plate ganó la Copa Libertadores con solvencia en el último tramo. Con luz ámbar en el inicio y verde en el recorrido final con el aplastante 3-0 a Tigres en el Monumental.
La campaña del once millonario no fue redonda, digamos. Tuvo tropiezos y fue Juan Aurich el que más golpeó el orgullo del campeón de la Copa Sudamericana. El equipo chiclayano lo tuvo al borde del nocaut pero como siempre pasa con los clubes peruanos, dejó que el rival recupere la postura.
El “Muñeco” Gallardo por poco queda como la momia Juanita con el 1-1 en el Monumental con el gol de Marcos Delgado. Y antes también fue empate en Chiclayo. River Plate no le pudo ganar al “Ciclón”.
La eliminación del Juan Aurich fue contra Tigres al que no lo pudo superar. Derrota 3-0 en suelo azteca y pueril revés en Chiclayo al caer 5-4 ante el equipo B del equipo donde alguna vez Marcos Calderón dirigió.
Juan Aurich desperdició la mejor versión copera que la historia le asignaba. Tuvo la ocasión de pasar a octavos de final y de paso dejó al hincha chiclayano con el vestido de novia puesto. Ya hacían planes para ver a Boca Juniors en el estadio Elías Aguirre.
River Plate sacó visa para jugar el Mundial de Clubes y Juan Aurich tiene otra realidad, pataleando contra la corriente en una triste actuación en el Torneo Apertura 2015.
Esas son las cosas que no alcanzamos entender. Siempre a medias. Con un lucero de tenue luz que no alumbra nuestras noches oscuras. En ese caminar entre penumbras no divisamos el otro lado de la orilla.
Eso le ocurrió a Juan Aurich en la presente edición de la Copa Libertadores. Estuvo cerca de los ojos pero lejos del corazón.
Estamos condenados a recoger las migajas de los que siempre obtienen ganar todo. Tener que conformarnos con una “buena copa” y nada más. Sin ser ambiciosospara coronar el máximo trofeo. Con una resaca maliciosa en la cabeza.
De vivir del recuerdo. De Universitario y Sporting Cristal que rozaron la gloria. Algo que ya no alcanza para satisfacer la curatela de una hinchada que tiene herida las entrañas.
Salvo Cienciano que ganó la Copa Sudamericana y la Recopa, en materia de logros pasamos por la trituradora en cada actuación. Y todos nos preguntamos. ¿Hasta cuándo?.