No sabes con quien te metes

 

Seguramente muchos de nuestros amables lectores ha sido testigo de alguna situación en la cual una persona ha utilizado la consabida frase “Usted no sabe con quién se mete”.

Si tomamos la frase literalmente debemos reconocer que efectivamente cuando nos relacionamos por primera vez con alguien no tenemos dato alguno sobre quién es, a qué se dedica, si trabaja o no. En fin, desconocemos todo sobre su pasado y su presente.

Otra cosa es la que nos dice nuestro conocimiento de la “cultura de la calle”. Esta frasesita, tantas veces empleada, suele ser un recurso para manifestar que se le debe rendir un tratamiento muy especial por alguna razón que la persona no informada desconoce y que sería de considerable importancia. Esta es una manera de amedrentar a la otra persona basada en la supuesta influencia de la que gozaría alguien.

Hemos escuchado decir: “Usted no sabe con quién se mete”, para evitar la multa que está imponiendo una policía de tránsito, para querer evadir la responsabilidad de un conductor ebrio quien ha dañado a otro carro, para responder a las protestas por haberse metido en el primer lugar de una cola o para evadir el control policial en una carretera. En fin, cada uno de nuestros lectores podría contarnos sobre más casos.

Intentemos explicar algunas razones para decir “Tú no sabes con quién te metes”.

En primer lugar, significaría que se tiene determinado poder social o político o que se está cerca de ese poder. Esta es una manera de evadir la responsabilidad, suponiendo que el tener poder o estar cerca de él haría posible actuar en contra de las normas o evitar sanciones. Las normas están hechas para que todos las cumplamos, si distinción alguna. Por eso nadie puede librarse de ellas bajo ningún pretexto. Ser amigo de un congresista, familiar de un ministro, vecino de un reconocido político o compadre del artista de moda no garantiza que la persona pueda portarse mal.

En segundo lugar, la persona sabe que no tiene la razón, que es ilógico que se salga con la suya, pero de todas maneras quiere imponer su equivocado criterio, simplemente porque le da la gana. Este es un inequívoco rasgo de persona inmadura que no sabe admitir sus culpas.

Lo más importante en la vida es saber en qué nos estamos metiendo. ¿No les parece?

 

Leave a Reply

You must be logged in to post a comment.

27713
V: 3159 | 118