Los casi genios
Para empezar con buenas maneras y porsiaca, como se dice en la popular fabla, yo nunca me he creído un genio. Soy más o menos inteligente, un reconocido creativo, un hombre muy respetuoso con mi profesión y, sobre todo, un leal amigo de mis amigos. Soy, además, afortunadamente pobre, certeramente honesto, trabajador cien por ciento...