El corresponsal no duerme jamás
El corresponsal, o el llamado “enviado especial”, que es lo mismo durante menos tiempo, duerme siempre mucho en las fronteras imaginarias de algunos (algunos) colegas. Por ejemplo, si está siendo testigo de un bombardeo, en Kosovo, pongamos por caso, ese redactor que está siempre tomando café en Madrid le responderá al teléfono: “Zutanito está ahora...