Las Fuerzas Armadas peruanas realizaron una operación de presencia institucional en la isla Santa Rosa, territorio ubicado en la confluencia fronteriza de Perú, Colombia y Brasil. Reporteros locales confirmaron el despliegue militar destinado a fortalecer la autoridad nacional mediante la instalación de símbolos patrios en el enclave disputado.
La comitiva castrense desembarcó junto a funcionarios de diversas entidades gubernamentales, dirigiéndose posteriormente hacia las instalaciones militares establecidas en Santa Rosa. El operativo formó parte de una estrategia orientada a consolidar la presencia del Estado peruano y estrechar vínculos con los residentes del área.
Durante la intervención, los efectivos militares colocaron la enseña nacional en múltiples sectores de la isla, al tiempo que brindaron asistencia a los requerimientos comunitarios. Estas acciones se desarrollan en un contexto de crecientes fricciones diplomáticas, luego de que el presidente colombiano Gustavo Petro cuestionara la pertenencia territorial del islote al Perú.
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Tensión diplomática sin incidentes registrados
Habitantes del sector corroboraron que no se produjeron altercados durante la operación, aunque manifestaron inquietud por los pronunciamientos del jefe de Estado colombiano.
El canciller peruano Elmer Schialer ratificó categóricamente la soberanía nacional sobre Santa Rosa, negando la existencia de controversias fronterizas con Colombia.
El jefe de la diplomacia peruana subrayó que las declaraciones provenientes de Bogotá carecen de fundamento jurídico, dado que la isla forma parte integral del departamento de Loreto bajo administración peruana.
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