LA PAZ.- Un tribunal de Bolivia decidió suspender las medidas cautelares contra la expresidenta interina Jeanine Añez y otros doce acusados por la matanza de Senkata de noviembre de 2019 al declararse su «incompetencia» para llevar el caso, lo que ha llevado a ordenar su puesta en libertad y sacar la causa de la justicia ordinaria.
«Respecto a la situación procesal de los acusados se dispone lo siguiente: se deja sin efecto las medidas cautelares de carácter real, carácter personal, en consecuencia se dispone expedir el mandamiento de libertad de todas las personas que guardan detención preventiva en los recintos penitenciarios y así como domiciliarios», ha indicado el juez David Kasa durante una vista judicial recogida por el diario boliviano ‘El Deber’.
El magistrado ha justificado esta resolución después de que un tribunal de la ciudad de El Alto haya declarado su «incompetencia» para tramitar este juicio. «Se estaría dejando pendiente en una situación insegura la situación de los ahora acusados que están con detención preventiva, además de los acusados con detención domiciliaria, siendo que la libertad es un derecho fundamental consagrado por la Constitución Política del Estado, así como también por los tratados de Derechos Humanos», ha explicado.
Además, un tribunal de La Paz ha anulado el proceso ordinario contra Añez y el resto de detenidos para pedir que en su lugar que la Asamblea Legislativa Plurinacional emprenda un juicio por responsabilidades, sacando así el caso de la justicia.
Añez esperará a la celebración del juicio fuera de prisión, donde ingresó en 2021 para cumplir una condena de diez años por violar la Constitución cuando se autoproclamó presidenta en el llamado caso Golpe de Estado.
Por el caso Senkata, la exmandataria está acusada por su responsabilidad y la de altos cargos militares en la represión de civiles que salieron a las calles a protestar tras la renuncia de Morales (2006-2019), una actuación que dejó una veintena de muertos y más de 200 heridos en lo que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) denunció como masacres.
Europa Press