La 38a Feria del Libro Ricardo Palma rindió homenaje al pintor Fernando de Szyszlo (1925-2017). Participaron en el acto el escritor Alonso Cueto, el filósofo, historiador y periodista Fernando Carvallo, la periodista y escritora Fietta Jarque y el antropólogo Juan Ossio, todos ellos amigos del artista.
No solo se comentó la trascendencia de la obra artística de Fernando de Szyszlo, sino también aspectos personales y su legado político y ciudadano.
“La suya fue una vida llena de contrastes”, empezó diciendo Alonso Cueto, a propósito del artista, cuya formación estuvo signada por la herencia científica de su padre médico y por la creatividad artística de su madre.
También hizo alusión a que su obra expresa tanto un amor hacia lo precolombino, como su inclinación hacia el lenguaje de la vanguardia.
Fernando Carvallo destacó cómo la obra de Fernando de Szyszlo, al romper con la representación figurativa propia del Indigenismo que lo precedió, trajo una visión nueva del arte precolombino, interpretado bajo los parámetros del arte abstracto del siglo XX.
Debe recordarse que en febrero de este año, Fernando de Szyszlo presentó su libro de memorias La vida sin dueño, proyecto que pudo concretar de la mano de Fietta Jarque.
La escritora y periodista acompañó ese proceso en que, según contó, el pintor resistió a dejar testimonio sobre sus técnicas de trabajo.
Sin embargo, resaltó que, más allá de lo que consta en el libro, ahora que el ciclo de la obra del pintor se ha cerrado, es momento para empezar a evaluar con amplitud lo que significa una obra que alcanza más de 3.000 cuadros.
Juan Ossio recordó que Fernando de Szyszlo compartió con Mario Vargas Llosa su amor por la libertad y por los derechos humanos.
A propósito de esto resaltó su compromiso político, que a menudo lo condujo a situaciones polémicas y a defender posiciones difíciles.
En cuanto a su arte, recordó la importancia que tuvo en ella la herencia prehispánica, al punto que tomó muchos motivos andinos y se inspiró en mitos como el de Inkarrí, o en el poema quechua “Apu Inca Atawallpaman”, traducido por José María Arguedas.
Asistieron a este homenaje mucho otros amigos del pintor, entre ellos Patricia Llosa, Luis Llosa, Fernando Ampuero, Diana Álvarez Calderón, Danilo Balarín y Carlos Pareja.
Me salgo del tema… Buen trabajo el de Gabino Amaya Cacho, espero hayan tenido la oportunidad de verlo, en especial, el puntillismo abstracto que es esa invención que redescubre el puntillismo. Puedes ver la obra e imaginar mil cosas, cada mente, cada espectador reinventa la intensión del pintor. Incluso, si imaginas lo contrario de lo que pensó el pintor cuando creó el cuadro es válido, de hecho, esa es la
idea de la pintura abstracta y es lo que me atrae de Cacho y otros grandes exponentes artísticos de esa modalidad. Entre los reconocimientos que ha ganado Cacho están Premio Walter Thomson (1991), Premio Villa de Leganés (1992), Accésit Asociación Barrio de Salamanca (1995), Copista del Museo del Prado (2004), entre otros.
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