El magnate surcoreano Chung Mong-Joon, que el pasado lunes lanzó oficialmente su candidatura a la presidencia de la FIFA, consideró que el francés Michel Platini, favorito para el puesto, no hizo lo suficiente para combatir la corrupción generada durante el mandato de Sepp Blatter.
En una entrevista que hoy publica el diario “L’Équipe”, Chung recordó que durante el periodo en el que fue vicepresidente de la FIFA trató de introducir transparencia en los contratos y combatir la corrupción en la institución.
Frente a esa actitud, el surcoreano reprochó a Platini no haber hecho nada. “Yo fracasé, pero al menos lo intenté”, dijo.
“En 1998, cuando Blatter heredó la cultura de la corrupción de Havelange, Platini hizo campaña por él y fue su consejero. Dice que no conocía los casos de corrupción. Le creo. Pero no es suficiente. Tenía que saber y debió hacer algo”, aseguró.
A sus 63 años, Chung es uno de los herederos del imperio industrial Hunday y postula a la FIFA con un programa muy concreto: permanecer un único mandato para acabar con la corrupción.
“La FIFA es una organización no gubernamental. En sus orígenes no era rica. El éxito financiero no debe ser su objetivo prioritario y sus dirigentes deben permanecer humildes, abiertos, respetados, queridos y dignos de confianza”, aseguró.
Para Chung, “el éxito financiero de la FIFA y el hecho de que no todo el mundo tenga el mismo sentido de la ética engendró el problema de la corrupción“.
Al frente de una fortuna estimada por la revista “Forbes” en 1.200 millones de dólares, aseguró que el hecho de que él mismo se financie su propia campaña le convierte en “menos sujeto a la corrupción“.
“Pero el gusto por el poder puede cambiar a cualquiera, por lo que me comprometo a estar solo un mandato de cuatro años. Espero que eso me proteja de la intoxicación del poder”, aseguró.