Nacido el 15 de diciembre de 1972 en Seúl, Corea del Sur, Lee Jung-Jae no siempre imaginó una vida bajo los reflectores. Sus inicios fueron modestos; mientras trabajaba como cajero en un café en el distrito de Gangnam, su carisma natural y su apariencia llamaron la atención del diseñador Ha Yong-Soo. Esta fortuita oportunidad lo catapultó al mundo del modelaje, un trampolín inesperado que lo llevaría a la actuación y, eventualmente, al estrellato mundial.
Su debut como actor llegó en 1993 con el drama televisivo «Dinosaur Teacher». Sin embargo, fue su papel en la aclamada serie «Sandglass» (1995) lo que lo convirtió en un nombre familiar en Corea del Sur. Su interpretación de un guardaespaldas silencioso pero carismático le valió múltiples premios a mejor actor revelación, consolidando su posición como una promesa en la industria del entretenimiento.
La transición al cine marcó un nuevo capítulo en su carrera. En 1998, su actuación en «An Affair» le otorgó un reconocimiento significativo, seguido de otro éxito en «City of the Rising Sun», por la que ganó el premio a Mejor Actor en los prestigiosos Blue Dragon Film Awards. Estos roles tempranos demostraron su versatilidad y capacidad para encarnar personajes complejos, sentando las bases de una carrera cinematográfica prolífica.
A lo largo de los años 2000 y principios de los 2010, Lee Jung-jae continuó destacándose en una variedad de géneros. Participó en éxitos de taquilla como «Oh! Brothers» (2003) y el thriller de acción «Typhoon» (2005). Su habilidad para elegir proyectos desafiantes y su constante evolución como actor lo mantuvieron en la cima de la industria coreana.
Un punto de inflexión en su carrera llegó en 2013 con el aclamado drama de gánsteres «New World» y la película histórica «The Face Reader». Por esta última, recibió el premio a Mejor Actor de Reparto en los Blue Dragon Film Awards y los Baeksang Arts Awards, demostrando su maestría tanto en papeles protagónicos como de reparto.
El 2021 redefinió su trayectoria profesional y lo catapultó al reconocimiento global con el fenómeno de Netflix, «El juego del calamar» (Squid Game). Su interpretación de Seong Gi-hun, el jugador 456, resonó con audiencias de todo el mundo, convirtiéndolo en una estrella internacional. Este papel no solo le valió un Screen Actors Guild Award, sino que también hizo historia al ser el primer actor asiático en ganar el Primetime Emmy Award a Mejor Actor Principal en una Serie Dramática en 2022.
El impacto de «El juego del calamar» abrió puertas a proyectos de gran envergadura. En 2022, Lee Jung-jae hizo su debut como director, guionista y productor con la película de espías «Hunt». La película fue aclamada por la crítica y se estrenó en el Festival de Cine de Cannes, demostrando su talento más allá de la actuación y consolidándolo como una figura multifacética en la industria.
Más allá de su carrera artística, Lee Jung-Jae también es un empresario exitoso. Ha lanzado una cadena de restaurantes en Seúl y ha fundado varias empresas, incluida la desarrolladora Seorim C&D, a menudo en colaboración con su amigo y colega actor Jung Woo-sung. Esta faceta empresarial subraya su visión y ambición más allá del set de filmación.
En 2024, su influencia continuó expandiéndose. Fue incluido en la lista A100 de Gold House, que reconoce a los asiáticos más impactantes. Además, marcó su incursión en Hollywood con un papel clave en la serie de Star Wars, «The Acolyte», que se estrenó en junio de 2024, consolidando su estatus como un verdadero icono global y embajador cultural de Corea del Sur.
Lee Jung-Jae es un testimonio de perseverancia y talento. Desde sus inicios como modelo hasta convertirse en un actor, director y empresario de renombre mundial, su trayectoria es una inspiración que demuestra que el arte y la visión pueden trascender fronteras y culturas.
Foto captura