El Ministerio de Relaciones Exteriores anunció que el cuerpo de Sheylla Gutiérrez, ciudadana peruana de 33 años víctima de feminicidio en territorio estadounidense, retornará al país en un período estimado de 14 días. Los familiares recibieron la notificación formal y se alistan para realizar las ceremonias de despedida.
El crimen causó gran impacto entre los peruanos residentes en el exterior. La mujer fue agredida de manera violenta por su conviviente, Jossimar Cabrera, quien según las autoridades norteamericanas la hirió con arma blanca en el torso y la zona dorsal, causándole el deceso. Lo que inicialmente se reportó como una desaparición se transformó en un caso de feminicidio cuando su cadáver fue encontrado en una zona boscosa de California.
La cartera de Relaciones Exteriores comunicó que ya se pusieron en marcha los procedimientos internacionales necesarios para el traslado del cuerpo, trabajando junto con las instituciones estadounidenses. Jorge Gutiérrez, progenitor de la fallecida, indicó que el comunicado ofrece tranquilidad parcial ante la angustia que experimentaban mientras aguardaban la confirmación del regreso de los restos.
Antecedentes del caso y proceso judicial
Previo al homicidio, la víctima había comunicado a sus parientes que era objeto de violencia psicológica de parte de Cabrera y que planeaba presentar una denuncia. De acuerdo con la Fiscalía angelina, la determinación de terminar la relación habría provocado la agresión fatal. Sistemas de videovigilancia captaron al presunto agresor movilizando un paquete envuelto en telas, posteriormente reconocido como el cadáver de la mujer.
En la actualidad, Cabrera está sujeto a un procedimiento de extradición después de haberse presentado ante Interpol Lima. El sistema judicial estadounidense lo juzgará por asesinato con circunstancias agravantes, mientras los parientes de la víctima demandan una sanción severa. «Nada nos devolverá a nuestra hija, pero este miserable debe pagar hasta el final de sus días», expresó entre lágrimas Jorge Gutiérrez.
Situación de los menores y perspectivas futuras
Durante este período de duelo, los tres menores hijos de la occisa permanecen al cuidado de sus abuelos maternos en la capital. La familia sostiene que, además de perseguir la justicia, su objetivo principal será garantizar el cuidado y el porvenir de los niños.
El retorno del cadáver representará un cierre simbólico para sus allegados, pero también el comienzo de una compleja contienda legal para evitar que el feminicidio permanezca sin castigo.
Imagen Radio Nacional